Rehabilitar a un drogadicto cuesta 20 millones
"Rehabilitar a un drogadicto le cuesta a Estados Unidos un millón de dólares [140 millones de pesetas] cada dos años, duración media del período de tiempo necesario para tal rehabilitación a través de los programas asistenciales norteamericanos", indican los psiquiatras Pedro Enrique Muñoz, coordinador del Programa Regional de Drogas de Madrid, y Eusebio Mejías, coordinador del área asistencial de este programa. "A nuestro programa también le saldrá muy caro, pero no tanto", comenta Muñoz, quien, en un cálculo estimativo apunta que el coste será de "unos 20 millones de pesetas".El período de tiempo que se considera idóneo para la rehabilitación de un drogadicto oscila entre el año y rriedio y los dos años, indican estos expertos. El citado programa no ha alcanza do ese plazo, pues se inició en oc tubre pasado y, por tanto, no existen aún datos ojetivos sobre los resultados que se puedan alcanzar con el mismo.
El plan cuenta con un presupuesto de 450 millones de pese tas a través de dos vías de financiación: el Plan Nacional de Drogas, que le aporta 98 millones por medio del Ministerio de Sanidad y Consumo y otros 153 millones del de Trabajo, y la Comunidad de Madrid, que le destina 200 millones. Este dinero está dirigido a crear la red asistencial y de rehabilitación necesaria. Además, el programa participa del personal, centros, y dispositivos de la red pública asistencial ya existente.
Tres canales asistenciales
Antes del inicio del programa, en la región de Madrid existían únicamente unas pocas camas haspitalarias para desintoxicación en los hospitales Ramón y Cajal, clínico de San Carlos y Santa Teresa, en Leganés. En la actualidad se mantienen de forma estable y con ocupación plena 16 camas en el hospital Provincial y en un anexo del Psiquiátrico Provincial, más otras aún no determinadas y próximas a ser concertadas con el clínico de San Carlos. Esta red se complementa con la ambulatoria y la de comunidades terapéuticas. En total, 13 centros en funcionamiento. Y, en perspectiva, otros 11 centros ambulatorios y otros siete urbanos de rehabilitación.
"El objetivo más inmediato es que cada uno de los 34 distritos sanitarios tenga un centro de asistencia ambulatoria, consolidar las plazas terapéuticas en comunidades urbanás y rurales y poner en marcha la red de reinserción social", indica Muñoz.
Según Mejías, la asistencia socio-sanitaria en Madrid tiene tres canales de actuación: Programa Regional de Drogas, una red de centros privados que a su vez mantiene conciertos asistenciales con el citado programa y una serie de organizaciones también privadas. Mejías no asume que éstas puedan clasificarse como incontroladas, aunque "no ofrecen suficientes garantías de transparencia".
Muñoz se refiere en este sentido a la posible promulgación de una normativa reguladora de acreditación de centros "que contemple unos mínimos exigibles para su funcionamiento de acuerdo con unos criterios sanitarios básicos". Al margen de esta red, "nutrida en buena medida por iluminados", según Mejías, y "en algunos casos con ribetes- mafiosos", según Muñoz, los otros dos canales asistenciales mantienen una interrelación sobre la que se pretende implantar este sistema de salud.
La actual red cuenta con una plantilla de personal multidisciplinar de 103 personas de nueva contratación y 150 que ya estaban contratadas en las distintas administraciones sanitario-sociales y que se han incorporado al programa. A este número se sumarán, a lo largo de este año, otros 60 profesionales para dotar los nuevos centros.
Dicha plantilla se reparte en los mencionados hospitales, en la comunidad terapéutica rural de Villaviciosa de Odón y en 12 centros ambulatorios los centros municipales de salud de Alcalá de Henares y Arganda; el centro de salud mental de San Blas; las unidades de salud mental de Ciudad LIneal, Alcobendas, Colmenar Viejo, Fuencarral, Getafe, Móstoles y Salamanca, y el centro municipal de toxicomanías de Leganés. También funciona incluido en esta red, concertado con la misma, el tradicional centro de la Cruz Roja de atención a drogadictos en la de Fúcar.
900 asistidos
Con tales medios asistenciales, el tratamiento a drogadictos tien.e un coste actual de 20.000 pesetas diarias la cama hospitalaria, 3.000 pesetas diarias la plaza de comunidad terapéutica. El progama en curso ha asistido hasta ahora a 900 drogadictos.
A la red actual se añadirán en los próximos meses y de forma más inmediata otros seis en Alcorcón, Coslada, Majadahonda, Parla, Torrejón de Ardoz. Y a éstos seguirán los de Aranjuez, Villaverde-Orcasitas, Latina, Caraban chel, Centro y Chamartín, este último promovidó porel Ayuntamiento de Madrid como centro de asistencia integral (CAI) del drogadicto, según la información facilitada por los responsables del programa.
Asimismo, se prevé la próxima firma de otros conciertos con la sociedad Hombre y con la Cruz Roja, y la creación de siete ceritros urbanos de rehabilitación, unos por parte de la Comunidad de Madrid y otros concertados con la Cruz Roja (en la calle de Marroquina) o la Administración municipal (Parla, Vallecas, Chamartín), con capacidad total para 150 plazas.
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