La Internacional Socialista concluye su congreso en un clima de fracaso, y preocupación por la actitud del Ejército peruano
A. C. ENVIADO ESPECIAL, El 17º congreso de la Internacional Socialista (IS), el primero que se celebra en América Latina, fue clausurado inesperadamente el domingo por la noche en el mismo clima de fracaso con el que se inauguró el viernes, sólo horas después de la matanza en las prisiones de Lima. En coincidencia con el final de los trabajos, que estaba previsto para la mañana del lunes, la IS emitió una declaración oficial en la que se hacía eco de las "serias preocupaciones, surgidas por posibles excesos en los métodos utilizados y el número de muertos" en la represión de los motines de las cárceles, donde murieron alrededor de 300 personas.
En la conferencia de prensa final, el reelegido presidente de la Internacional Socialista, a Billy Brandt, manifestó que la organización tiene el compromiso del presidente peruano, Alan García, de "formar una comisión investigadora parlamentaria en la que está incluida la oposición y personalidades independientes".La declaración de la IS afirma que "el presidente Alan García ha admitido la gravedad de los sucesos al garantizar que se llevarán a cabo varias investigaciones incluyendo una parlamentaria. También ha garantizado la completa independencia de estas investigaciones sobre posibles violaciones de derechos humanos. Existe una clara determinación de esclarecer todos los hechos y de garantizar la sanción de los que resulten responsables de cualquier irregularidad".
La nota añade que "el presidente García también ha dicho que las puertas de Perú están abiertas a las organizaciones internacionales de derechos humanos para comprobar esto".
La elaboración de este documento fue fruto de una difícil negociación entre los delegados y el presidente García en la que, según fuentes del congreso, las delegaciones de España y 'Venezuela estuvieron entre las más reacias a aprobar una declaración que pudiese perjudicar al Gobierno peruano. Los miembros del partido socialista holandés y de otros países del norte de Europa eran los más partidarios de una dura condena a los métodos empleados por el Ejército peruano para intervenir en las cárceles contra los presos de Sendero Luminoso.
Sobre este aspecto aportó ayer nuevos datos la Comisión Andina de Juristas, una organización de la judicatura peruana, que afirma que "la información disponible permite llegar a la conclusión de que las autoridades no usaron, con la consistencia que la situación de mandaba, de la persuasión y el diálogo, imprescindibles para evitar el previsible derramamiento de sangre".
La citada organización denuncia que "a los jueces intructores se les ha negado el ingreso a los penales para la actuación, de acciones de hábeas corpus planteados en favor de los internados y, lo que es más grave aún, no se les ha permitido participar en el proceso de reconocimiento de cadáveres y necropsia antes de la inhumación".
La Comisión Andina de Juristas asegura que "se ha procedido a inhumar los cadáveres furtivamente". El secretario general de la Alianza Popular Revolucionaria Americana, partido en el Gobierno, Armando Villanueva, que representa a su partido en el congreso de la Internacional Socialista, explicó que los entierros se habían realizado "por razones biológicas, porque se estaban descomponiendo", pero negó que no se hubiera informado a los familiares.
Los sucesos en las prisiones han oscurecido por completo el congreso socialista, del que se esperaban importantes resultados sobre temas latinoamericanos. Algunos delegados comentaban al abandonar Lima que probablemente sería necesaria la convocatoria próxima de un congreso extraordinario.
Acciones guerrilleras
A la ausencia de algunos altos dirigentes socialistas por los compromisos en sus países -Felipe González tuvo que descartar el viaje por la convocatoria de elecciones anticipadas- se unieron posteriormente la del jefe del Gobierno italiano, Bettino Craxi, y la primera ministra noruega, Gro Harlem Brundtland, que quisieron mostrar con su ausencia su desacuerdo con la matanza.
El congreso se ha visto además, acosado por los atentados terroristas. El Movimiento Revolucionario Tupac Amaru -un grupo de guerrilla urbana menos activo que Sendero Luminoso- despidió ayer a los delegados con la ocupación de las oficinas de cuatro agencias internacionales de noticias en Lima, al igual que Sendero les había dado la bienvenida con la colocación de tres explosivos en los alrededores del hotel y el intento de disparo de un mortero contra el congreso.
Los 400 dirigentes socialistas de 75 partidos políticos de todo el mundo se fueron de Lima, además, con la noticia de que una cadena de televisión que en la noche del domingo había anunciado imágenes espeluznantes sobre lo ocurrido en las cárceles sufrió inmediatamente una avería técnica que le obligó a cortar sus emisiones.
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