Fernández Ordóñez presenta un panorama poco halagüeño para España frente a la CE

El ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, presentó un panorama poco halagüeño para España respecto a la Comunidad Europea (CE) y de ésta con relación a la economía de Estados Unidos y de Japón, en una reunión con unos 250 empresarios y financieros de Aragón. "Entrar en el Mercado Común no es ningún chollo", dijo el ministro en tono coloquial. Se refirió a que cuando termine el período transitorio nos quedaremos "a la intemperie" en un mercado de 300 millones de consumidores.

"Todos tenemos que espabilar y saber con quién nos jugamos los cuartos", afirmó el ministro de Asuntos Exteriores. "Estamos ante un desafío: los productos europeos van a entrar más fácilmente al mercado español y los nuestros también podrán ser colocados mejor en el mercado europeo. Es una ingenuidad pensar que España va a entrar en la CE sin enterarnos".Fernández Ordóñez, que estuvo acompañado del secretario de Estado para las Comunidades Europeas, Pedro Solbes, trazó un panorama general de la situación antes de someterse a las preguntas de los empresarios. Dijo que no es válido hablar de dos bloques económicos, sino de tres: la Europa comunitaria, Estados Unidos y Japón. Precisó que las economías europeas "funcionan mal" con respecto a Estados Unidos y Japón.

Añadió que Europa necesita fijar un modelo de crecimiento, crear un gran mercado y continuar con una política de "ajuste y rigor: caben pocas alegrías" plantear nuevas estrategias entre patronales y sindicatos, flexibilidad interna (mejora de la organización del proceso de producción) y externa (horario y funcionamiento).

Fernández Ordóñez anunció que el Gobierno español presionará la próxima semana ante la CE para que se refuerce una política de cohesión mediante un esfuerzo comunitario, para propiciar la adaptación de los países que acaban de ingresar en el mercado europeo. También dijo que en una próxima reunión de Felipe González con el presidente francés, Mitterrand, y el primer ministro, Chirac, se va a tratar, entre otros temas, las comunicaciones transpirenaicas entre Francia y España, tema que tanto preocupa a Aragón.

Tanto el ministro como Solbes rechazaron que la devaluación de la peseta sea una solución al problema de las exportaciones españolas.