El PSOE acepta incluir en su programa la ampliación de las pensiones a nuevos colectivos

El PSOE, aceptó ayer incluir en su programa electoral casi todas las propuestas presentadas por UGT,según manifestó el secretario general de la central socialista, Nicolás Redondo.El presidente del Gobierno, Felipe González, y Redondo presidieron una reunión que se prolongó durante casi cinco horas. Entre los puntos que los socialistas asumirán en su programa destaca la ampliación del sistema no contributivo o asistencial de pensiones, que permitirá recibir prestaciones a personas que hoy se encuentran desprotegidas. Algunos aspectos del documento presentado, por UGT quedan pendientes de posteriores debates, pero, en líneas generales, la Propuesta programática de la Unión General de Trabajadores ha sido aceptada.

Felipe González, presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, presidió la larga reunión en la que UGT presentó un documento con los puntos que considera necesario incluir en el programa electoral socialista. Sus propuestas, muchas de ellas con un alto nivel de concreción, fueron asumidas por los representantes del partido.Queda, sin embargo, por discutir cómo llevar a la práctica algunas de las medidas que el sindicato ha planteado como actuaciones urgentes. En los próximos días, ambas organizaciones continuarán unos contactos que han venido precedidos de reuniones celebradas durante el pasado fin, de semana.La polémica reforma de las pensiones, que tan duros enfrentamientos provocó hace ahora un año entre el Gobierno socialista y la central que dirige Nicolás Redondo, será objeto de un nuevo tratamiento. Se trata de transformar "profundamente todo el sistema de pensiones no contributivas o asistenciales", según destacó Apolinar Rodríguez, secretario de acción sindical.El documento de UGT contenía en este punto una serie de propuestas que, en líneas generales, serán incorporadas al programa del PSOE. Aunque todavía quede por definir el mecanismo que habrá, de: poner en marcha la nueva reforma, el partido socialista ha aceptado modificar los requisitos para acceder a la pensiones de carácter asistencial, de manera que colectivos que hoy están excluidos queden dentro del sistema y con derecho a prestación.Poder adquisitivo En Seguridad Social, UGT pedía que se garantizara el poder adquisitivo global del conjunto de pensiones _tanto las nuevas como las antiguas_, y, sobre todo, que se incluyera en el sistema de pensiones no contributivas a quienes no cumplieran los requisitos exigidos para acceder a las prestaciones de invalidez, así como reducir y flebilizar las condiciones para tener derecho a una pensión asistencial. Ello, en definitiva, supone ampliar los colectivos bajo protección, y acarrearía una aportación mayor del Estado a la Seguridad Social, cosa que, por otra parte también exigía UGT. Todo ha sido aceptado. Respecto a políticas específicas sobre la mujer, el PSOE asume presentar al Parlamento un proyecto de ley que amplie el permiso retribuido por maternidad de las 14 semanas actuales hasta 16.

El PSOE se ha comprometido también a recoger en su programa el aumento de la cobertura del desempleo, para conseguir que, como mínimo, la mitad de los parados tenga derecho a protección. Nicolás Redondo calificaba anoche* el encuentro de positivo, aunque mantenía una cierta cautela sobre el resultado final de las conversaciones. "Cuando hayamos finalizado los encuentros, la ejecutiva o el comité confederal decidirán si apoyamos el programa", indicó. Redondo admitió que "nunca hay garantías de que los programas, se cumplan". "Se trata de un compromiso moral y político", dijo, "y yo confío en que el PSOE lleve a término sus promesas". El secretario general de UGT señaló que los socialistas han cumplido gran parte de su anterior programa electoral y que no conoce el contenido del que ahora se está elaborando. Sin embargo añadió que, al aceptarse las indicaciones de UGT, podría ser perfectamente asumido por los trabajadores. Más cautos fueron Francisco Fernández Marugán y Manuel Chaves, quienes, en nombre del PSOE, se limitarón a comentar que "no hay grandes divergencias". "Puede haber distintas sensibilidades, pero en esencia estamos de acuerdo", indicaron. Entre los puntos sobre los que todavía no existe acuerdo figuran la reducción de jornada _que el PSOE prefiere remitir, a la negociación colectiva_, la democracia industrial y la posibilidad de que los sindicatos gestionen el pago del desempleo. El resto de las propuestas fue aceptado, incluyendo la aplicación de una política económica expansiva y el crecimiento salarial por encima de la inflación. Por otra parte, Pablo Castellano, miembro, significado de Izquierda Socialista, manifestó ayer a la agencia Efe que la dirección del PSOE ha despreciado la invitación de diálogo de esta corriente socialista. "Hay una decisión desde la dirección del partido de ir paulatinamente poniendo fin a la experiencia del juego de corrientes", dijo.