Preguntas sobre cine italiano
¿Por qué el cine italiano, el único europeo que llegó a hacer, y de esto no hace mucho tiempo, competencia comercial al cine norteamericano, se ve obligado ahora a acudir al socorrido sistema de semanas en el extranjero, de escaparates de promoción, que sólo son necesarios para cinematografías en bancarrota o desconocidas, imprescindibles para darse a conocer y ampliar su audiencia?Que una pregunta como ésta pueda y deba formularse, pues a la vista está su razón de ser después de finalizada ayer sin pena ni gloria una Semana de Cine Italiano en Madrid que se ajusta a esas características de escaparate promocionador de ventas, presupone en parte su contestación y no hace falta decir que ésta no es halagadora para el cine italiano o, al menos, para las huellas de gloria que ayer mismo dejaba tras de sí.
¿Qué ha ocurrido en el cine italiano para que de punta de los mercados cinematográficos europeog haya pasado al rasero de la uniformidad, del estancamiento, de la falta de elocuencia y del uno más entre otros? ¿Por qué el gancho de esta semana italiana es la última obra de un cineasta como Fellini, un residuo de esa época de esplendor para la que parecen no existir otras opciones salvo la de algunos herederos aislados, como Marco Ferreri, Ettore Scola o Bernardo Bertolucci, cada vez menos representativos de la producción media italiana?
¿Dónde se esconden las joyas de esa producción media italiana, que antaño eran analizadas con lupa por los plagiarios de todo el mundo cinematográfico europeo? ¿Qué es de la incomparable herencia de Monicelli, Antonioni, Risi y aquella generación de maestros del cine europeo? ¿No tiene heredero el gran Rossellini? ¿Se pueden considerar, a la vista de lo que hay, sólo como salidas de tono de un poeta visionario y aficionado a la tragedia aquellas pesimistas predicciones sobre el destino del cine italiano de Pier Paolo Pasolini poco antes de morir asesinado?
Babelia
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