Los aviones partieron del Reino Unido de la VI FIota

Estados Unidos atacó esta madrugada objetivos "militares y terroristas" en Libia, sólo horas después de que los países europeos recomendaran prudencia a Ronald Reagan y decretaran sanciones diplomáticas limitadas contra Muammar el Gaddafi, que Washington ha considerado insuficientes. Los ataques se realizaron a partir de las siete de la tarde (hora de Washington), las dos de la madrugada (hora libia), por bombarderos F-111, que volaron desde bases de la OTAN en el Reino Unido, y por los aviones embarcados en los portaviones Coral Sea y América. El portavoz presidencial, Larry Speakes, informó al país por televisión del ataque a, las 2.20 (hora peninsular española) y afirmó que se trataba de un acto legítimo de ,"autodefensa" por el atentado terrorista de la discoteca de Berlín Oeste, en el que el pasado 5 de abril murió un soldado norteamericano, y una ciudadana turca.

El presidente explicó personal mente a las cuatro de madrugada (hora peninsular española) a los norte americanos el alcance y la Justificación de los ataques aéreos contra Libia. En la tarde de ayer Reagan convocó en la Casa Blanca a los líderes del Congreso y les informó, que había dado la orden de atacar. Se desconocía anoche si Reagan ha invocado para ello la ley de Poderes de Guerra, que obliga al Ejecutivo a informar al Parlamento de la entrada en hosti lidades de fuerzas militares norte americanas. Fuentes gubernamen tales dijeron esta madrugada que todos los aviones empleados en la operación habían regresado a sus bases sin sufrir daños y que el cuartel general de Gaddafi en Trípoli había sido también atacado. [La emisora oficial libia informó que miembros de la familia de Gaddafi habían resultado heridos en el ataque, desconociéndose si en el momento del bombardeo se encontraba en su residencia el líder libio.]Los ataques de la aviación se dirigieron contra objetivos militares. Al parecer, primero fueron inutilizadas las bases de cohetes soviéticos Sam-5 y Sam-2 de: Sirte, Bengasi y las cercanías de Trípoli. Estos bombardeos fueron calificados por Speakes como "acciones limitadas de autodefensa de nuestras fuerzas".

Así trataba de neutralizar la capacidad de respuesta llibia, escasa en cualquier caso y prácticamente inexistente de noche, cuando su aviación nunca vuela.

Posteriormente, se realizaron nuevos ataques, al parecer con los aparatos embarcados en los portaviones, contra lo que se describió esta madrugada como la "infraestructura terrorista" en Libia.

Instalaciones de espionaje

Esta segunda oleada se concentró en instalaciones de espionaje y comunicaciones -los centros de transmisión de Libia con sus embajadas-, objetivos logísticos. Se cree que pudieron ser bombardeados los puertos y campos de entrenamiento específicos de terroristas. En Libia hay, según la CIA, 28 de estos campamentos. Algunos de ellos, al parecer los atacados anoche, se encuentran en la franja costera, cerca de Trípoli y Bengasi. Los ataques fueron "cuidadosamente preparados para evitar da¡los a la población civil", explicó la Casa Blanca. "No podíamos aguardar a que Gaddafi. nos atacara de nuevo. Esperamos que esto sirva para impedir que vuelva a utilizar el terrorismo contra Estados Unidos", afirmó Larry Speakes. A las cuatro y media de la madrugada (hora peninsular española), tras la aparición del presidente en televisión, los secretarios de Estado, George Shultz, y de Defensa, Caspar Weinberger, explicaron a los norteamericanos los detalles de la operación militar, que estaba minuciosamente preparada. A las nueve de la mañana de ayer (hora de Washington), las cinco de la tarde (hora peninsular española el Pentágono ordenó a los portaviones de la VI Flota que se aproximaran a Libia desde su posición de espera al sur de Sicilia. A las dos de la tarde (hora de Washington), las nueve de la noche (hora de Londres), un número indeterminado de bombarderos norteamericanos FB- 111 despegaron de sus bases de Inglaterra y, tras ser abastecidos de combustible en vuelo sobre el sur de Francia o el Mediterráneo, recorrieron 2.000 millas, en un trayecto de ida y vuelta, para efectuar los ataques. Previamente, Reagan había logrado una aprobación reticente de la primera ministra británica, Margaret Thatcher, para utilizar las bases en el Reino Unido."La decisión de golpear militarmente no tiene nada que ver con lo ocurrido ayer por la tarde en La Haya", donde los europeos acordaron sanciones limitadas de advertencia contra Gaddafi, aseguró Larry Speakes. "Es el punto final de una escalada contra Libia, que habíamos iniciado hace meses con medidas económicas", dijo. "Hemos celebrado un gran número de consultas en las últimas horas con los aliados (Vernon Walters, enviado especial de Reagan, ha estado en Londres, París, Madrid y Roma) y Canadá también ha sido consultada", explicó Speakes.

La impresión aquí es de que Estados Unidos ya había decidido previamente utilizar unilateralmente la fuerza militar, con independencia del apoyo o de la reacción de los europeos, a quieries Washington considera incapaces de actuar en serio contra Libia debido a los 15.000 millones de dólares (más de dos billoii.es de pesetas) de comercio que tienen con ese país. La Casa Blanca ofreció esta niadrugada algunos detalles más sobre las pruebas que, en opinión de Washington, han justificado este golpe militar contra el país norteafricano. Estados Unidos interceptó en marzo las órilenes. enviadas,desde Trípoli a las embajadas libias en Europa para atacar in.tereses norteamericanos. Una de ellas fue recibida en la, Oficina Popular Libia (embajada) en Berlín Este. Libios enviados por dicha representación diplomática fueron vistos en Berlín Oeste por el espionaje estadounidense y, la Embajada de Gaddafi en la RDA informó a Trípoli el 4 de abril que el atentado en Berlín Occidental se realizaría el día 5, como efectivamentre ocurrió. Después de estallar la bomba en la discoteca, la Oficina, Popular Libia en Berlín Este comunicó a Trípoli que el atentado había sido efectuado con éxito y que no podría ser vinculado con Libia.

La Casa Blanca dijo esta madrugada que Gaddafi había proyectado nuevos ataques terroristas contra intereses norteamericanos en Europa, África, Oriente Próximo y Latinoamérica. Diplomáticos libios han estado vigilando a diplomáticos norteamericanos y los intereses comerciales de Estados Unidos. También sus líneas aéreas se encuentran entre los objetivos designados por Gaddafi, explicó el portavoz. presidencial. La presencia de unos mil norteamericanos en Libia, que no han abandonado el país, a pesar de las órdenes dadas en ese sentido el pasado enero por el presidente Reagan, es un motivo de preocupación en Washington. por la posibilidad de que puedan ser utilizados como eventuales rehenes o sufrir represalias tras los ataques aéreos de esta madrugada.