Un grave revés para el sector turístico

I.C., "Nunca más cruceros en aguas árabes", afirmaban en El Cairo, tras su liberación, los pasajeros-rehenes del trasatlántico italiano Achille Lauro, secuestrado por un comando palestino. Cuatro meses después, los turistas que se hospedaban en cuatro hoteles de lujo saqueados por los amotinados pronuncian frases parecidas.

La revuelta de los policías supondrá un graverevés para el turismo internacional en Egipto, cuando justamente el Gobierno cairota esperaba potenciar esta fuente de divisas para paliar el brusco bajón de sus ingresos a causa de la disminución del precio y de las cantidades de petróleo exportadas, de las remesas de los tres millones de emigrantes y del cobro de los derechos de peaje por la utilización del Canal de Suez.

Más de 600 visitantes extranjeros fueron robados e insultados en los establecimientos hoteleros Sphinx, Jolie Ville, Holiday Inn y Mena House, situados cerca de las pirámides, y algunos sufrieron le siones de diverso grado al tener que lanzarse por las ventanas para evitar ser pasto de las llamas. El hotel Mena House, famoso porque acoge en sus salones a las delegaciones egipcia e israelí que negocian el futuro del enclave de Taba, era considerado como el más lujoso de El Cairo. El daño sufrido por la industri a turística se evalúa oficialmente en unos 105 millones de dólares (casi 15.000 millones de pesetas), calculando no sólo el costo de la reparación de los cuatro hoteles de lujo sino también lo que éstos dejarán de ganar esta temporada. Paralelamente, se informa que la tripulación de Iberia que se hallaba aislada por la revuelta en el Mena House fue evacuada ayer sana y salva.

A finales del pasado mes de enero, el ministro egipcio de Turismo Y Aviación Civil, Fuad Abdel Latif Sultan, reconoció en una conferencia de prensa que su país padecía las consecuencias de las operaciones terroristas contra el tras,atlántico italiano Achille Lauro y el avión Boeing de la compañía Egypt Air desviado un mes más tarde hasta la isla de Malta, pero vaticinó que esta tendencia a la baja de la afluencia turística "desaparecería paulatinamente".

Las previsiones oficiales para 1985 apuntaban a un aumento modesto de 100 millones de dólares (unos 14.000 millones de pesetas) para los ingresos por turismo, que hubiesen debido alcanzar 700 millones; pero a partir del otoño se multiplicaron las anulaciones de los tour operadores y estimaciones aún oficiosas recogidas por la Prensa internacional indican que Egipto sólo ha obtenido 300 millones de dólares por este concepto.

Menos llegadas

Aunque tampoco se dispone aún de estadísticas completas que abarquen todo el año pasado, el número de extranjeros que entraron en el país en los 11 primeros meses asciende tan sólo a 1.410.463, menos que los que cruzaron sus fronteras durante el mismo período de 1984. El desglose de esta cifra muestra que mientras el contingente de europeos aumenta ligeramente, el de viajeros procedentes del golfo Pérsico disminuye, a causa probablemente de la pérdida de poder adquisitivo que padece la población de estas monarquías, achacable al bajón del precio del petróleo.