La moción contra el alcalde de San Fernando, una maniobra para construir el vertedero, según el PCE

El comité regional del Partido Comunista de España (PCE) cree que la moción de censura contra el alcalde comunista de San Fernando de Henares, Enrique Guerra, presentada por los seis concejales pertenecientes a la Mesa para la Unidad de los Comunistas, será apoyada por el PSOE con el fin de conseguir así que el nuevo alcalde diera el permiso necesario para instalar en este término municipal el vertedero regional de residuos industriales, a cuya instalación se opone Enrique Guerra.Pedro Diez, secretario general del comité regional, declaró ayer: "Sería muy grave que la realidad confirmara nuestros temores y fuera una maniobra en este sentido. Nos gustaría equivocarnos, pero la sombra de Eduardo Mangada, consejero de Ordenación del Territorio de la Comunidad, planea sobre este tema".

Para Díez, la sustitución del actual alcalde sería un engaño para los votantes. "El pueblo votó al PCE, y los concejales que ahora solicitan la moción de censura fueron elegidos dentro de las listas de este partido. No existe base para sustituir al actual alcalde por otro, representante de un grupo del que no se sabe su programa electoral y que puede terminar hasta en el PSOE".

En la actualidad la corporación municipal de San Fernando de Henares está formada por seis concejales del PCE, otros seis de la Mesa para la Unidad de los Comunistas, tres socialistas, de los que, según el alcalde, uno no acude nunca al Ayuntamiento, y dos de Alianza Popular. De prosperar la moción de censura, en caso de que los socialistas votaran a favor junto a los de la Mesa, el alcalde que proponen estos últimos sería Antonio Fernández Gordillo, primer firmante de la moción. Para ello, si no acudieran los tres concejales socialistas, tendrían que votar también a favor de la moción los de Alianza Popular.

El alcalde, Enrique Guerra, afirmó: "La moción de censura tendría que estar justificada de algún modo. Desde el punto de vista de gestión no pueden decir nada, pues el Ayuntamiento funciona normalmente. Tenemos, por ejemplo, una nivel de endeudamiento del 17%, por lo que tenemos margen hasta para pedir préstamos". Guerra manifestó que, por tanto, hay que hacer una segunda lectura a la presentación de la moción. "Con esta postura los carrillistas intentan atacar duramente al partido y pegarle en el corazón. Asimismo, un apoyo del PSOE confirmaría que el tema del vertedero está detrás, como parece indicarlo el hecho de que al día siguiente de que Mangada y yo expusiéramos nuestra postura contraria los carrillistas afirmaran en una publicación por primera vez que sí estaban a favor del vertedero". Por último, Guerra manifestó que, de prosperar la moción, el PCE recurriría, pues, según dijo, la ley de Bases no permite hacer mociones de censura hasta después de las elecciones de 1987.