El SIDA y la guerra

Del SIDA preocupan mucho los efectos y poco las causas. Los instítutos científicos se disputan los derechos de autor de la vacuna, la gente habla de los homosexuales y hemofílicos, pero el origen del SIDA es un misterio que no parece preocupar ni a la opinión pública ni a la Prensa. A este respecto, hay un hilo del que aún no se ha tirado: la hipótesis de una conexión entre la guerra bacteriológica y el SIDA, y ello debería ser investigado en profundidad.El origen puede ser tan simple como unos monos que contagian al hombre en la remota África. Pero no debemos olvidar que los monos se utilizan a menudo en los experimentos bacteriológicos, que estos experimentos no suelen hacerse en las grandes ciudades, sino en sitios apartados y ¿qué mejor lugar que un país africano, por ejemplo Zaire, que está dentro de la órbita occidental, donde hay monos a punta de pala y a nadie le interesa lo que haga un puñado de científicos?

En 1986, año de la paz, los departamentos de Defensa de muchos países siguen experimentando con enfermedades infecciosas, alteraciones de la mente y guerra química. Hay extrañas enfermedades que pudieran coincidir con un experimento desbordado. Sea o no cierta esta hipótesis, convendría un control por parte de organismos internacionales de los experimentos de guerra bacteriológica que siguen practicándose en el mundo.-