González afirma que España saldrá de la OTAN si pierde el referéndum

"El Gobierno español no podría mantener a España en la Alianza Atlántica" si la mayoría del pueblo español se muestra contraria", afirmó ayer el presidente del Gobierno, Felipe González, durante una conferencia de presnsa conjunta con el secretario general de la OTAN, lord Carrington, tras entrevistarse ambos mandatarios por espacio de dos horas y media y almorzar juntos en el palacio de la Moncloa. El dirigente de la Alianza declinó hacer comentarios sobre la consulta, que consideró "asunto exclusivo del pueblo español". En ambos encuentros estuvieron presentes el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, y el portavoz del Gobierno y ministro de Cultura, Javier Solana.

Es la primera vez que Felipe González afirma explícitamente que un resultado adverso en el referéndum supondría la denuncia del Tratado de Washington, al que España se adhirió en 1982. En sus últimas intervenciones en televisión, el presidente del Gobierno había afirmado que sería "consecuente" en caso de perder el referéndum, pero sin aclarar cuál sería la postura concreta que adoptase.Felipe González dijo también que estaba "razonablemente seguro" de ganar el referéndum, en el que pedirá el sí a la permanencia de nuestro país en la OTAN.

Carrington afirmó ante los informadores que no veía "ningún motivo" para que los otros países miembros de la Alianza se opongan al deseo español de permanecer fuera de la estructura de mando militar.

El secretario general de la OTAN aseguró que en la organización, lo mismo que en un restaurante, se puede comer "a la carta". Cuando alguien va a un restaurante y pide la carta", dijo, "le crea más problemas al chef que si simplemente pide el menú de la casa". 'Hasta cierto punto", añadió, "yo soy aquí el chef, y, por tanto, prefiero el menú, pero comprendo a los que quieren comer a la carta".

Carrington aseguró que los países de la Alianza han comprendido siempre las posiciones especiales de algunos países, bien de tipo geográfico o político.

El secretario general de la Alianza unió la permanencia en la OTAN con la entrada de España en la CEE, al tiempo que restó importancia al papel de Estados Unidos en la organización.

'La CEE no es una alianza", dijo, "pero es una sociedad en la que vale la pena entrar, y cualquier sociedad en la que vale la pena entrar es también una sociedad que vale la pena defender".

Por su parte, Manuel Fraga, líder de la oposición conservadora, mantuvo ayer tarde una entrevista de 45 minutos con Carrington, al término de la cual reiteró el propósito de Coalición Popular de que España "se integre en todos los comités y participe plenamente en todas sus actividades". Explicó que su postura obedece al deseo de "no quedamos con las manos atadas por circunstancias del momento" y "dejar las manos libres a otro Gobierno".

Fraga ofreció una versión escrita de su conversación con Carrington antes de que ésta se celebrase. En esa versión se afirma, entre otras cosas, que "la Coalición Popular considera que la celebración del referéndum es consecuencia de unas promesas electorales realizadas desde el absoluto desconocimiento de la situación y condiciones de la política defensiva española, lo que supone, por parte del Gobierno, la anteposición de los intereses de partido a las razones de Estado". Página 10