Moscú califica de propagandísticas las denuncias estadounidenses

La agencia Tass expresó el pasado domingo el rechazo de los dirigentes soviéticos ante los recientes informes estadounidenses que denuncian supuestas nuevas violaciones de los tratados sobre control de armamentos por parte de la URSS. Moscú considera estas acusaciones como un "fraude propagandístico" y asegura que constituyen un intento, por parte de Washington, de desacreditar a la Unión Soviética ante el mundo y justificar sus propios avances en el campo armamentista.

Según Tass, el informe elaborado por la Administración Reagan, que acusa a la URSS haber cometído nueve violaciones en el control de armamentos "contiene conocidas invenciones que no se fundan en ningún hecho concreto y que ya han sido rebatidas en más de una ocasión".

Por otra parte, la URSS acusó ayer a Washington de desarrollar investigaciones secretas sobre las posibles formas de superar los sistemas de defensa antimisiles (ABM) enemigos. El portavoz de las fuerzas armadas soviéticas, general Nikolai Chervov, citó en este sentido una serie de informes de la Prensa norteamericana según los cuáles el Pentágono está desarrollando misiles de crucero capaces de eludir las defensas enemigas.

Según Chervov, EE UU está perfeccionando también las tecnología para accionar misiles balísticos intercontinentales y lanzables desde submarinos, con el objetivo de intentar reducir su fase de lanzamiento, durante la cual son muy vulnerables a las defensas antimisiles. El portavoz soviético también rechazó la afirmación del presidente Reagan de que la guerra de las galaxias constituye un sistema defensivo, y declaró que, en caso de ser puesta en práctica, "las armas espaciales penderán sobre nosotros como la espada de Damocles".