_
_
_
_
_

Los musulmanes de Ceuta y Melilla piden una demora en la aplicación de la ley de extranjería

Representantes de los musulmanes de Ceuta y Melilla han solicitado al Gobierno, en reuniones mantenidas en Madrid con altos cargos de los ministerios de Interior y Justicia, una moratoria en la aplicación de la ley de extranjería a estos colectivos. Aomar Mohamedi Dudu, portavoz de los colectivos y líder musulmán melillense, afirmó ayer en conferencia de prensa que los responsables de Interior comienzan a reconocer la posibilidad de que exista una situación especial de estos colectivos".

El ministro de Interior José Barrionuevo, comunicó a Joaquín Ruiz Giménez, Defensor del Pueblo, su intención de aceptar las sugerencias de esta institución para que la ley de Extranjería no sea aplicada en Ceuta y Melilla sin estudiar los supuestos especiales que se dan.El subsecretario del Interior, Rafael Vera, con quien los musulmanes se han entrevistado en Madrid, "ha admitido, en principio, la posibilidad de aplicar una mayor moratoria para la puesta en marcha de la ley de extranjería", afirmó Mohamedi Dudu. El plazo para acogerse a la ley de Extranjería finaliza el próximo 31 de enero. En caso de no prosperar sus propuestas, los musulmanes, que se mostraron altamente optimistas, señalaron que organizarán la anunciada marcha a Madrid.

El miércoles, Aomar Moha, medi Dudu y Hamed Subaire, este último dirigente musulmán de Ceuta, se entrevistaron con el defensor del pueblo, Joaquín Ruiz-Giménez, a quien explicaron los problemas que tienen los colectivos musulmanes en ambas ciudades, especialmente los relativos a la posible aplicación de la ley de extranjería. Esta ley puede suponer la expulsión de España de varios miles de integrantes de dichos colectivos o, en el mejor de los casos, la concesión de una tarjeta de extranjero, aunque muchos de los musulmanes nacieron en dichas plazas.

Al término de la entrevista, Mohamedi Dudu manifestó que. Ruiz-Giménez se había mostrado muy comprensivo con la situación de los musulmanes en Ceuta y Melilla y que les había expresado la intención de transmitir sus impresiones a los ministros de Interior y Justicia, José Barrionuevo y Fernando Ledesma, respectivamente. Más tarde, el Defensor comunicó al titular de Interior las conclusiones de la charla con los representantes musulmanes. En círculos juridícos se ha interpretado la colaboración entre el Defensor y el Ministerio de Justicia como una prueba de voluntad para resolver el problema.

Las sugerencias del Defensor del Pueblo en cuanto a la aplicación de la ley de Extranjería en las plazas de Ceuta y Melilla, se centraban en diferenciar las circunstancias de los musulmanes, en su mayoría residentes durante muchos años en estas ciudades.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_