El Gobierno de Nueva Zelanda asegura que no entregará a París a los dos agentes franceses
El primer ministro neozelandés, David Lange, declaró ayer, en relación con el comandante Alain Mafart y la capitana Dominique Prieur -los dos agentes del servicio secreto francés que han sido condenados a 10 años de prisión por el atentado contra el barco ecologista Rainbow Warrior-, que su país "no está dispuesto a vender a los prisioneros" y que éstos "cumplirán su pena en Nueva Zelanda".
Estas declaraciones siguen a las realizadas el pasado viernes por el ministro de Defensa francés, Paul Quilés, de que el Gobierno francés hará todo lo posible para lograr un "pronto retorno" de ambos agentes. Según,declaró Lange, Mafart y Prieur no saldrán de Nueva Zelanda hasta que se cumpla el plazo de cinco años previsto por la legislación de su país para una posible liberación bajo fianza.
Por su parte, los sismólogos neozelandeses anunciaron ayer que Francia realizó el lunes otro experimento atómico en Mururoa.
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