_
_
_
_
ELECCIONES AL PARLAMENTO GALLEGO

Fraga asegura que los socialistas han hundido Galicia

Coalición Popular celebró ayer un mitin en Ferrol en el que participaron Manuel Fraga y Gerardo Fernández Albor y donde se vertieron duros ataques a la política económica del Gobierno. Fraga aseguró que los socialistas "han hundido Galícia con su política de reconversión naval y el incumplimiento de sus proinesas".El líder de la oposición conservadora no tuvo reparo en proclamar ante su público: "Ferrolanito que vienes al mundo te guarde Dios, porque si los dejas el señor Guerra y el señor Laxe te van a partir en dos". Fernández Albor declaró por su parte, según informa Efe, que el PSOE no habla en esta campaña de socialismo "porque si dijese que quiere el socialismo en Galicia, Coalición Popular podría dar por finalizada la campaña puesto que ningún gallego les iba a votar".

Más información
Coalición Popular será la fuerza más votada, pero no tiene segura la mayoría absoluta, según un sondeo de EL PAÍS

Este mitin ha puesto de relieve que cuando fa campaña gallega ha sobrepasado ya su ecuador, la figura de, Manuel Fraga continúa acaparando la atención de los medios informativos, haciendo sombra no sólo a los rivales, sino también al propio candidato de Coalición Popular a la presidencia de la Xurita, Gerardo Fernández Albor. El líder de Alianza Popular -informa Fernando Jáuregui- ha configurado, más que nadie, estas elecciones autonómicas como unas primarias de las próximas legislativas, poniéndose a sí mismo el difícil listón de obtener una mayoría absoluta en Galicia. La peculiar caravana electoral que, precedida por un viejo autobús de dos pisos -tipo británico- ha recorrido ya dos veces las provincias gallegas casi de cabo a rabo, viaja bajo el eslogan de Fraga-86.

La 'serpiente multicolor'

"La política no se hace en el asfalto, sino en el campo. Yo, lleno de limitaciones como estoy, soy el político que ha estrechado más manos, que hatomado más copas con la gente". Esta afirmación, que retrata a la perfección lo que está siendo la campaña particular de Manuel Fraga en su tierra natal, merienda y cena en público, organiza y elabora queimadas sin descanso, presenta libros, firma fotografías, inaugura obras públicas, llama a las puertas, se enloda los zapatones estrenados en esta campaña. El ya veterano Volvo verde que un día le regalaron algunos amigos, entre ellos el presidente del Banco de Santander, es una imagen habitual en las carreteras gallegas, donde a la caravana electoral le llaman la serpiente multicolor. Tan habitual como la sólida figura del ocupante del Volvo, tocado con un sombrero de ala corta y el inseparable abrigo bávaro -"y ahí, querido amigo, terminan las semejanzas con Baviera y con el señor Strauss"-.Pasados los primeros días de campaña, Fraga parece haber decidido olvidar el tono moderado tan querido por asesores de imagen y de estrategia, y haber vuelto a su clásica actitud populista y brusca: "Los socialistas xa foderon bastante Galicia", dijo hace unos días en Viana do Bolo, haciendo las delicias de oyentes y periodistas y haciendo de paso que alguno se atragantase en el séquito oficial.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_