Provisiones secretas para el riesgo latinoamericano

Bancos españoles, por imperativo del Banco de España, han tenido que realizar obligatoriamente, por primera vez en el pasado ejercicio, provisiones específicas para sus riesgos con los países, latino americanos, dados los aplazamientos en el pago de intereses y amortizaciones del principal de la deuda que tenían contraída.Las cifras de estas provisiones no se han hecho públicas, prefiriendo los bancos englobarlas con el resto de provisiones para las operaciones crediticias realizadas con españoles. Junto a la tradicional reserva bancaria para que no se pueda indentificar a los clientes, parece que ha existido también un cierto deseo de que no se sepa hasta dónde llega el riesgo de cada institución financiera con países que atraviesan por problemas graves que imposibilitan hacer frente al pago de sus obligaciones exteriores.

Esto tiene sentido en la medida en que cuando ocurre esto los bancos tienen que hacer mayores provisiones para cubrirse de posibles pérdidas. Indudablemente, los bancos que acaben teniendo que reconocer pérdidas Por esta situación, como le ha ocurrido al Bank of America, se encuentran en peor posición que sus competidores a la hora de tener una cotización en bolsa o de tener la confianza de los depositantes.

Pero, por lo mismo, tanto los accionistas como los depositantes tienen derecho a recibir información suficiente para poder evaluar en qué tipo de riesgos incurren las instituciones financieras en las que invierten o tienen depositados sus ahorros.

Sólo tres declaran

De los siete grandes bancos nacionales -Central, Español de Crédito, Hispano Americano, Bilbao, Vizcaya, Popular y Santander-, sólo tres declaran en sus memorias el volumen de provisiones realizadas en virtud de la circular riesgo-país del Banco de España. Banesto declaró 640 millones de pesetas; el Popular, 2.970 millones, y el Santander declaró por su parte 25,67 millones de dólares (el equivalente a algo más de 4. 100 millones de pesetas a un cambio de 160 pesetas por dólar).

El resto de grandes entidades señala que ha hecho las provisiones marcadas por la circular, pero no las cuantifica. Solamente el Banco Hispano Americano declaró, fuera de memoria, que las provisiones para operaciones riesgo-país ascendieron, en 1984, a 2.887 millones de pesetas.

El Banco Exterior de España, el octavo banco nacional con mayoría de capital público, realizó tinas provisiones superiores a los 13.000 millones de pesetas, lo que le coloca claramente a la cabeza de los bancos por este concepto. En algunos medios se considera que estas provisiones podrían estar por encima de lo necesario, lo que podría provocar algunos ajustes a la hora de hacer la liquidación fiscal a esta entidad.