Un concejal de HB en Rentería, golpeado y 'tatuado' con las siglas GAL

Varios individuos, al parecer armados, golpearon en la mañana de ayer, en Rentería, al concejal de Herri Batasuna, de esta localidad, Agustín Celigüeta y le marcaron con un objeto punzante. Los agresores rayaron el cuerpo del concejal con largos y finos trazos lineales y le inscribieron en un brazo las siglas GAL (Grupos Antiterroristas de Liberación).Según el testimonio prestado por la víctima ayer tarde a los medios informativos, la agresión se produjo minutos antes de las 2.00 horas, en el portal de su casa, en el centro de Rentería. "Me golpearon por detrás en la nunca y me empujaron dentro del portal, yo me quedé medio desvanecido por el golpe y enseguida se me echaron encima, me tumbaron y me colocaron una bolsa de plástico en la cabeza que me impedía respirar. Yo", señala Agustín Celigüeta, "no podía oírles muy bien, pero escuché algo así como: hijo puta, a ver si el próximo año vas a volver a poner la ikurriña; y 'valiente, ya teníamos ganas de cogerte'".

El concejal de Herri Batasuna señala que sus agresores actuaron en todo momento con gran tranquilidad. "No me rasgaron la camisa sino que me la desabrocharon lentamente, mientras otros me golpeaban; después me marcaron todo el cuerpo, los brazos, la espalda, las nalgas y los muslos y me abandonaron allí mismo, histérico y lleno de sangre.

Agustín Celigüeta indicó que no pudo ver el rostro de sus agresores, ya que dijo: "me colocaron una pistola en la cabeza y me advírtieron que si me volvía me pegarían un tiro". La Policía Municipal de Rentería ha afirmado, por su parte, que poco después de esa hora, un coche Seat Ritmo o Ronda, matrícula de Vitoria, color gris metalizado, recorrió la calle Viteri de Renteria a toda velocidad y accedió en dirección prohibida a la carretera general. La víctima ha presentado denuncia en un juzgado de San Sebastián que instruye diligencias.

Al filo de las 3.00 horas de ayer, en Zizurkil (Guipúzcoa), una bomba produjo graves destrozos en una sociedad popular, poco después de que fuera abandonada por un grupo de vecinos.