La guerra de las 'colas'
El espacio es el escenario en el que va a tener lugar una peculiar guerra entre dos compañías comerciales, durante la próxima misión del Challenger. Se trata de una batalla entre Coca-Cola y Pepsi-Cola, las multinacionales que han puesto a punto los recipientes experimentales que permitirán a los cosmonautas consumir bebidas gaseosas.
Coca-Cola reclama para sí el derecho a ser la primera bebida gaseosa que se introduce en eI espacio ya que, según sus representantes, un documento suscrito entre esta compañía y la agencia espacial americana NASA así lo especifica y, por tanto, aseguran que la presencia a bordo del Challenger de Pepsi-Cola, su principal competidor, contraviene este acuerdo.
El portavoz de la NASA, Charles Redmond, afirmó, por su parte, que los acuerdos a los que llegó con las dos compañías son idénticos y asegura que la agencia espacial americana había invitado a todos los fabricantes de bebidas gaseosas a diseñar recipientes que pudieran ser probados a bordo de la nave.
La ausencia de gravedad impedía, hasta ahora, poner bebidas gaseosas en el menú de sus cosmonautas, que debían conformarse con agua, zumos de fruta o café, contenidos en recipientes de plástico y que debían tomar con paja.
