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El debate parlamentario sobre política exterior iniciará la campaña del Gobierno sobre la OTAN

El inicio de la campaña explicativa sobre la OTAN es una de las principales tareas que el Gobierno tiene pendiente a su regreso de vacaciones. Medios gubernamentales señalaron que esta campaña comenzará una vez que se celebre el debate parlamentario sobre política exterior, en el que se intentará un consenso sobre el decálogo expresado hace ya casi un año por el presidente del Gobierno, Felipe González. Este debate tendrá lugar "a finales de septiembre o en octubre, en todo caso poco antes del dedicado al estado de la nación", añadieron estos medios.

Los miembros del Gobierno -excepción hecha del titular de Exteriores, que viajará a Marruecos el 11 de agosto y, probablemente, de algunos miembros del equipo económico, que deberán seguir ajustando el borrador de los Presupuestos- dedicarán el mes de agosto en su casi totalidad a las vacaciones, preparando lo que algunos ministros admiten que puede ser un otoño especialmente caliente "o, al menos, difícil".El próximo miércoles, día 31 tendrá lugar el último Consejo de Ministros del actual curso político, y en él se debatirán algunos temas pendientes de importancia: el Plan Estratégico Conjunto, la devolución del patrimonio sindical y la ampliación del Museo del Prado, entre ellos. Además, naturalmente, de continuarse la discusión de los presupuestos generales del estado para 1986, proyecto de ley que debe entrar en las Cortes antes del 1 de octubre. El 1 de agosto Felipe González acudirá a Mallorca para despachar con el Rey, comenzando así oficialmente una vacaciones que se prolongarán hasta el 26 de agosto.

Pese a sus propósitos de dedicar la última parte de la actual legislatura a "aplicar" las leyes ya elaboradas, más que continuar la producción legislativa, el Gobierno deberá enviar a las Cortes en los próximos meses numerosos proyectos de ley; entre ellos se encuentra uno de tanta trascendencia como el de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, que será probablemente aprobado en septiembre, antes de que se produzca la anunciada reestructuración en el Ministerio del Interior. Otro gran tema pendiente, que debe quedar resuelto antes de que Felipe González disuelva las cámaras -probablemente a finales de la primavera de 1986- para convocar las elecciones, es el de la televisión privada, que estará regulada antes del mes de marzo. Sin embargo, será sobre el Ministerio de Exteriores sobre el que gravitarán los temas más espinosos del otoño. Por el momento, la reforma orgánica del ministerio, que debería haber quedado concluida ya, se ha visto retrasada por las diferencias de criterio acerca de la ubicación real que deben tener en el futuro las relaciones con la CEE, que para un sector del Gobierno deberían depender del Ministerio de Hacienda más que de Exteriores.

Será Exteriores quien deberá coordinar la campaña de explicación sobre la OTAN, en la que se volcará "el Gobierno en pleno" a partir de septiembre, con la vista puesta en el referéndum, "el escollo más importante y difícil que tenemos planteado", según admitieron varias fuentes gubernamentales. Conectada indirectamente con este tema, aunque directamente con el decálogo de Felipe González, se encuentra la negociación con los Estados Unidos sobre reducción de sus tropas en España, negociación que Fernández Ordóñez reemprenderá el lunes con su colega norteamericano, George Shultz, en Helsinki.

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