'Las hilanderas', de Velázquez, se expone ya en el Prado tras su restauración

El cuadro Las hilanderas, pintado por Diego Velázquez en 1657, se puede ver desde ayer, ya restaurado, en el Museo del Prado de Madrid. La limpieza de esta obra, que corrió a cargo de las restauradoras del museo Mayte y Rocío Dávila, fue realizada tras la firma de un convenio entre el Ministerio de Cultura y la Empresa Nacional de Ingeniería y Tecnología (Initec), mediante el cual ésta sociedad se comprometió a financiar la operación, realizada en los talleres de la pinacoteca nacional.Al igual que en sus cuadros de juventud, Velázquez introdujo en Las hilanderas, junto a personajes realistas, una evocación también realista y cotidiana de la leyenda de Aracne. Ésta cuenta que todas las mujeres de Lidia acudieron para para admirar los tejidos producidos por Aracne, bajo la atenta mirada de Minerva, creadora del oficio de tejer. La obra es una delicada alusión al mecenazgo del rey y al talento de sus artesanas, alegoría sugerida en el segundo plano, en una suerte de sala trasera iluminada por la izquierda.

Velázquez recurre en este cuadro a un oficio con tanta capacidad de sugerencia que algunos expertos se han preguntado si la mujer que se mantiene a la izquierda, bajo el dintel de la puerta, no es, de hecho, un personaje del tapiz del fondo. El artista juega genialmente con las relaciones entre arte y realidad.