El ministro de Economía y Hacienda no ha convocado todavía a la patronal CEOE

"El ministro de Economía y Hacienda no nos ha convocado todavía a una reunión", declaró José María Cuevas, presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), en el transcurso de una conferencia de prensa en la que anunciaron que han enviado un documento al presidente del Gobierno exponiendo las medidas urgentes en materia de flexibilidad laboral, reducción del gasto público, fomento de la inversión y reducción de las cuotas empresariales a la Seguridad Social. Carlos Solchaga mantuvo ayer una cena de trabajo con los presidentes de los grandes bancos, dentro de su decisión de iniciar contactos con todos los grupos sociales.

José María Cuevas, que afirmó que no se atrevía a dar una opinión sobre las causas y las consecuencias de la reciente crisis ministerial, señaló que "el señor Boyer era una de las personas que se encontraba en mejores condiciones para conocer la situación real de la economía española y los problemas que se avecinan ante la entrada en el Mercado Común". Cuevas fue bastante explícito al afirmar que "quizás Boyer presumiera que no iba a tener la suficiente fuerza para tomar las importantes medidas que debería adoptar si se quieren buscar soluciones".

Mayores dificultades

En fuentes de la CEOE se indicaba, una vez concluida la conferencia de prensa, que Carlos Solchaga encontraría aún mayores dificultades que su predecesor en conseguir que se aprobaran dichas medidas. El anuncio de que el nuevo ministro de Economía quiere mantener conversaciones con los sindicatos, las organizaciones empresariales y la banca, provocará, se decía en esas fuentes, intentos de pactos que llevarán aparejadas cesiones que pueden echar al traste el modelo de ajuste iniciado en la etapa anterior.José María Cuevas destacó que, en cualquier caso, el presidente del Gobierno se había comprometido personalmente, en la conferencia de prensa en la que anunció la crisis ministerial, a mantener la política económica diseñada anteriormente. Pero, afirmó, "esto no nos basta. Los empresarios somos pragmáticos y hemos visto que en los dos últimos años una cosa han sido las declaraciones sobre la situación económica y los diagnósticos de la misma y otra, bastante distinta, la realidad".

Cuevas señaló que no entendía porque ahora se hablaba de "relanzar la concertación" cuando aún está vigente el compromiso del Acuerdo Económico y Social. Para Cuevas los empresarios, y también el sindicato firmante, aunque con menor intensidad, han cumplido sus compromisos asumidos en el AES. "El que no ha cumplido ninguno de los compromisos asumidos es el Gobierno". Ahora se trata de que el Gobierno los cumpla y "que UGT no impida que el Gobierno lo haga".

El presidente de la CEOE, que se mostró muy crítico con el ministro de Trabajo, Joaquín Almunia, "ya que dice cosas distintas ante foros internacionales que ante su propio partido", explicó que la idea central del documento enviado al presidente del Gobierno -con el que querrían mantener una reunión- es lograr que la empresa española se sitúe en el mismo grado de competitividad que las empresas europeas. Para ello, señaló, "es necesario que podamos jugar con las mismas reglas".

José Luis Cerón, presidente de la comisión de economía de CEOE, indicó que el documento tiene una parte de medidas de acciones básicas y urgentes y otras de menor importancia que se consideran imprescindibles para lograr que el impacto de la incorporación de España a la CEE sea el menor posible.

Cerón señaló que ha encontrado cierta receptividad en el Ministerio de Hacienda en usar la política fiscal como instrumento de fomento de la inversión mediante mayores desgravaciones y la posibilidad de que se amplíe la base de cálculo sobre la que se admitan esas deducciones. La necesidad de reformar la ley del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas para introducir las modificaciones necesarias que acaben con la discriminación de las parejas en las que trabajen los dos cónyuges podría ser utilizada por Hacienda para promover cambios que permitan estas mayores desgravaciones. La propuesta de CEOE es subir hasta el 40% la base desgravable y que la deducción llegue hasta el 30% cuando se trate de inversión en capital riesgo, dadas las fuertes necesidades de capitalización de las empresas españolas.