Los problemas de MeIilla

He estado en Melílla dos veces consecutivas de vacaciones, y no sólo para comprar sino para estudiar sus costumbres e historia. Deseo manifestar desde una óptica de izquierdas que así como los nórdicos son racistas con los españoles, nosotros lo somos con los gitanos, portugueses, y sin duda alguna con el pueblo marroquí (me refiero al racismo en general de todos los pueblos, no personal), dentro de esta historia interminable de siglos de guerras por religiones, razas y por la lucha de clases.Con todos los respetos para el pueblo marroquí, que últimamente ha sufrido una represión brutal por parte de su monarca, quiero preguntar, sin embargo, por la marginación que tienen los parados en España (3.000.000) y por la vida marginada de los habitantes de los barrios periféricos de nuestras ciudades. Yo he visto en Melilla hebreos junto a hindúes, al lado de marroquíes y españoles, una de las cosas que tiene dicha ciudad es ese sabor dulce de comunicación entre los pueblos.

Viendo el problema con un poco de perspectiva, creo que hay alguien orquestando y engañando a la población española, en general, sobre que hay devolver las dos ciudades más antiguas de España. Los problemas urbanísticos de esa ciudad vienen de lejos, ¿o es que cuando teníamos gobiernos de derecha no había dichos problemas? Creo, con toda sinceridad, por otra parte, que no todo en Melilla es Ejé-.rcito. De paso quiero felicitar al alcalde de Melilla por su valiente carta.-