La policía investiga la relación de dos detenidos en l'Escala con la muerte de un general francés

Tres inspectores de policía franceses llegaron ayer a Gerona para interrogar a los súbditos galos Jacques Ruiz y Paul Bosso, detenidos el pasado 30 de mayo en l'Escala (Baix Empordà) por presunta tenencia ilícita de armas. Los agentes intentan esclarecer si los detenidos participaron en el atraco perpetrado hace más de un año en la sucursal del Banco Nacional de París (BNP) en Lyon, en el que resultó muerto el general Guy Delfoss. El interrogatorio no pudo celebrarse debido a que el juez Esteban Ferrer, titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Gerona, debió ausentar se de su despacho.La presunta implicación de los dos detenidos en l'Escala en el atraco a la sucursal del BNP en Lyon nace del parecido de uno de ellos con el autor de los disparos que causaron la muerte del general y en el hecho de que una de las armas que les han sido ocupadas podría ser la misma que se utilizó en el asalto. Las declaraciones de los testigos permitieron a la policía francesa efectuar un retrato robot con el que Paul Bosso guarda un asombroso parecido, según las fuentes consultadas.

El revólver que disparó contra el general es un Smith Wensson, serie 28/2, calibre 357 magnum con el número de serie N298825. Este revólver fue encontrado por la policía española en el camino que conduce a la playa de Montgó, debajo de una piedra. Los agentes aprehendieron también otro revolver, marca Reck-Wildcat, calibre 38 especial con número de serie 33150 que se encontraba en el interior del apartamento ocupado por los dos franceses. Al parecer, este segundo revólver fue robado junto a otras armas de un transporte que viajaba desde Lyon a Burdeos con destino a la armería Sur-Arme.

A Ruiz y Bosso también se les acusa de haber participado en otro atraco a una sucursal bancaria en la localidad de Val de Bains. En las declaraciones efectuadas ante la policía y ante el juez, los dos franceses han negado su participación en los hechos mencionados.

Los policías franceses llegaron ayer a Gerona después de que el juez Ferrer contestara afirmativamente un escrito, cursado la pasada semana por Interpol, solicitando poder tomar declaración a los detenidos. En su respuesta, el juez advirtió que el interrogatorio debería efectuarse en presencia de la policía española y de los abogados de los dos franceses.

El interrogatorio no pudo efectuarse ayer porque a las 13.15 horas, cuando los agentes franceses se personaron en el Juzgado de Instrucción número 1 de Gerona, su titular se había ausentado para asistir en Figueres a un acto de despedida del juez Josep Juanola, titular del Juzgado de Instrucción número 1 de la capital ampurdanesa. La presencia de Ferrer en este acto no pudo ser confirmada directamente por este diario.

Comisión rogatoria

Los investigadores franceses habían anunciado previamente al Juzgado que llegarían a Barcelona por vía aérea a las 10 de la mañana y que se dirigirían seguidamente a Gerona.

Paralelamente a la petición formulada por Interpol, la juez Kleimann, titular del Juzgado de Instrucción de Lyon que investiga el atraco a la sucursal del BNP, cursó una comisión rogatoria con idéntico fin. Este mecanismo jurídico permite a los jueces extranjeros solicitar a sus colegas españoles que procedan a interrogar a un detenido en los términos descritos en un formulario adjunto.