_
_
_
_

Reagan apela al pueblo para presionar contra la reducción del presupuesto militar

El presidente norteamericano, Ronald Reagan, defendió vehementemente el pasado sábado, en un discurso radiado a la nación, la necesidad de no limitar el presupuesto militar y apeló a los ciudadanos ante la evidencia de que el Congreso no satisface sus peticiones."La tendencia de algunos líderes a cerrar sus ojos al mundo real, su falta de realismo acerca de nuestros adversarios y el asalto continuo del comunismo a la libertad humana requiere que afrontemos la necesidad de restaurar una efectiva disuasión", dijo el presidente. Reagan criticó veladamente a la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, por no haber llegado a un compromiso con el Senado, de mayoría republicana, sobre los gastos militares. El Senado, con el visto bueno del presidente, limitó los gastos de defensa para 1986 al nivel de la inflación, mientras que la Cámara baja los congeló al nivel del presente año.

"Debemos tener un adecuado presupuesto militar", afirmó Reagan, después de indicar que su . primera responsabilidad es salvaguardar la seguridad del pueblo estadounidense". El presidente pidió un aumento del 6% sobre la inflación; después, y ante la evidencia de la derrota, redujo a un 3% sus pretensiones, al tiempo que llamaba "acto irresponsable" a la decisión del Senado de limitarlo al nivel de la inflación, que días después se vio obligado a aceptar.

El Congreso se muestra firme en su decisión de aprobar reducciones del presupuesto con objeto de disminuir el enorme déficit público, que está ensombreciendo el despegue económico experimentado en los dos últimos años y amenaza con sumir al país en otra recesión.

La vehemente llamada radiofónica del presidente norteamericano a sus ciudadanos, para que le ayuden a mantener los gastos de defensa, es una prueba más de la soledad en que comienza a encontrarse. Como hiciera semanas antes para defender la ayuda a la guerrilla que combate al régimen de Nicaragua y, también como entonces, tras haberse visto obligado a ceder a última hora, Reagan trata de convencer a su electorado para que presione a la Cámara de Representantes. Pero los indicios apuntan a que, entonces como ahora, nadie parece aceptar el "creedme" del presidente: "Me reuniré con el Congreso y el secretario de Defensa, Caspar Weinberger, para tratar el presupuesto militar y, creedine, vamos a continuar el ataque al despilfarro y al fraude en las adquisiciones".

Un tercio de los impuestos va a parar al saco sin fondo del presupuesto de Defensa. Desde que Ronald Reagan llegó al poder, en 1981, los gastos por este concepto han sido de más de un billón de dólares (unos 175 billones de pesetas)

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_