El estado de salud de Tancredo Neves se complica por una hemorragía intestinal
El presidente electo de Brasil, Tancredo Neves, de 75 años de edad, fue trasladado de urgencia a un hospital de la ciudad de San Pâulo, en la mañana le ayer, víctima de una hemorragia en el intestino lelgado. Los médicos que le asisten anunciaron en un parte oficial que será necesario efectuar una tercera operación, ya que la hemorragia no pudo ser controlada por métodos terapéuticos. Los especialistas advirtieron que será una intervención difícil y que podrían presentarse complicaciones de tipo respiratorio e infeccioso.
, La noticia del súbito empeoramiento en el estado de salud de Neves sorprendió a los brasileños. Las contradicciones entre la verdadera situación del presidente y las afirmaciones oficiales ya habían alarmado al país en los últimos diez días. Una parte de la Prensa brasileña destaca las ácidas divergencias entre los médicos de Brasilia, responsables de la primera intervención quirúrgica, y la junta de especialistas convocados a la capital una vez que quedó patente que el presidente no reaccionaba de manera positiva al tratamiento posoperatorio.Hay señales evidentes, según médicos brasileños, de que hubo una serie de errores en el tratamiento inicialmente aplicado a Tancredo Neves. Otros médicos afirman, pidiendo siempre que sus nombres no sean citados, que la primera intervención no fue hecha de manera "totalmente feliz". La hemorragia detectada ayer surgió en uno de los puntos de sutura realizados en la
primera intervención.
Lo que más alarmó a los brasileños, sin embargo, fue que los nuevos médicos que asumieron la atención de Neves -considerados los mejores del país- también se equivocaron en sus previsiones. El jefe del equipo médico, el doctor Henrique Pimotti, afirmaba el lunes que el presidente sería dado de alta en menos de una semana. Los diarios de ayer publicaban en la portada las primeras fotos del presidente luego de las dos intervenciones quirúrgicas y aseguraban que se estaba recuperando.
El presidente electo empezó a sentir dolores en el abdomen alrededor de las siete de la tarde del lunes. Cinco horas después, los médicos decidieron trasladarlo a Sâo Paulo, pero fue necesario esperar hasta pasadas las 6.30 horas para llevarle al aeropuerto. La explicación oficial de esa demora fue "cuestiones técnicas con el avión presidencial".
A las 8.15 horas Tancredo Neves bajaba del avión en Sâo Paulo, en una camilla, con el rostro cubierto por una sábana. A la misma hora, el vicepresidente en ejercicio, José Sarney, impartió instrucciones a todos los ministros para que se quedaran en sus despachos.
Las fuerzas políticas empiezan a prepararse para afrontar la posibilidad de que el presidente electo, Tancredo Neves, no llegue a asumir la presidencia. Los dirigentes de los principales partidos políticos han asegurado respaldar la Constitución y a José Sarney. Según la Constitución, en caso de que el presidente electo muera, Sarney se convertirá en presidente efectivo.
