Irak se atribuye la victoria en la batalla de las marismas

Irak parece haber rechazado, según las informaciones de los corresponsales en la zona, la gran ofensiva lanzada en los últimos días por Irán en el frente sur de la guerra del Golfo, mientras se multiplican los esfuerzos internacionales para poner fin a un conflicto que dura ya 53 meses. Bagdad se ha convertido ahora en el principal objetivo iraní. Un misil tierra-tierra, el cuarto en seis días, según fuentes de Teherán, cayó ayer sobre un barrio residencial de la capital iraquí, y el primer ministro de Irán, Hosein Mousavi, advirtió anoche a través de Radio Teherán que el aeropuerto de Bagdad será blanco de sus cohetes como represalia por la amenaza iraquí de derribar los aviones de líneas comerciales que sobrevuelen Irán.

Numerosos extranjeros residentes en Teherán abandonaron ayer por avión la capital antes de que entrase en vigor -a las cinco de la tarde, hora promedio de Greenwich (seis de la tarde, hora peninsular española)- la amenaza iraquí de derribar los aparatos de líneas comerciales. A partir de ahora, para abandonar Irán será necesario hacerlo por carretera hacia las fronteras con Turquía y la URSS.El corresponsal de la agencia Reuter Subhy Hadad comprobó ayer que había cientos de cadáveres iraníes esparcidos en las marismas de Howeiza, escenario de una de las más cruentas batallas libradas hasta ahora.

Los periodistas acreditados en Bagdad fueron autorizados el lunes a visitar esta zona, hasta un punto situado a 20 kilómetros de la frontera con Irán, y no encontraron tropas iraníes. El Gobierno de Bagdad facilitó la expedición periodística para desmentir que los iraníes hubiesen ocupado la orilla occidental del río Tigris para dominar la carretera que une Bagdad con la segunda ciudad del país, Basora. Teherán afirma que ha tomado una importante región petrolera de unos 500 kilómetros cuadrados.

El corresponsal de Reuter informó desde la localidad de Al Uzayr: "Hemos visto cientos de cadáveres iraníes a ambos lados del río". La misma agencia añade que las baterías de misiles instaladas alrededor de Al Uzayr -situada sobre la carretera Bagdad-Basora, entre Al Amara y Al Qurma- abrieron fuego ayer contra las líneas iraníes, instaladas, al parecer, a unos 40 kilómetros en dirección al territorio iraní. Los jefes militares iraquíes afirman que han sido vencidas en la batalla de las marismas ocho divisiones del Ejército regular iraní y unidades de los guardianes de la revolución.

En Bagdad se produjeron ayer 11 muertos y un número indeterminado de heridos como consecuencia de la explosión registrada en un barrio de la ciudad. Teherán afirma que se trata del cuarto misil lanzado en seis día sobre la capital iraquí, pero fuentes oficiales de Bagdad aseguran que es en realidad una acción de saboteadores. Los observadores extranjeros se preguntan sobre el tipo de cohetes de que debe disponer Irán para alcanzar Bagdad, teniendo en cuenta que la capital se encuentra a 130 kilómetros de la frontera de Irán Hasta ahora no se conocía que el Ejército iraní dispusiese de misiles de tan largo alcance, aunque fuentes diplomáticas especulan con la posibilidad de que Teherán haya comprado recientemente cohetes a Libia.

El presidente iraní, Alí Jamenei, quien el lunes se entrevistó con un enviado especial del primer ministro indio, Rajiv Gandhi, presidente en ejercicio del Movimiento de Países No Alineados, aseguró estar dispuesto a llegar a un acuerdo para no atacar las áreas civiles.

El líder de la Organización de la Conferencia Islámica, el presidente de Gambia, Dawda Jawara, tiene previsto trasladarse a Arabia Saudí el próximo sábado para iniciar gestiones de paz.

Varios países están organizando preparativos para la evacuación de sus ciudadanos de territorio iraní e iraquí: 350 ciudadanos de Alemania Occidental salieron ayer de Teherán en un vuelo especial de Lufthansa; Air France sacó del país a 150 italianos, y ayer despegaron otros aviones para evacuar a ciudadanos austríacos, yugoslavos y de países del este de Europa.