El primer ministro de Cabo Verde admite que aceptó la peticion de acoger a los membros de ETA detenidos en Anglet

El primer ministro de Cabo Verde, Pedro Pires, dijo ayer, en declaraciones a EL PAÍS, que su país quiere "la paz y la seguridad internacional", y es "porque no podemos ser indiferentes por lo (que hemos aceptado la petición de España de recoger en nuestro territorio a un grupo de miembros de ETA Militar que van a ser expulsados en breve de Francia". Pires anunció que este grupo de etarras detenidos en la localidad francesa de Anglet "residirá, en principio, en la isla de San Vicente", en el mismo régimen de libertad de que gozan otros confinados vascos en países de Africa y Latinoamérica y podrán recibir las visitas de sus familiares.

La petición del Gobierno español, transmitida a las autoridades de Cabo Verde mediante un mensaje de Felipe González, que trajeron en persona aquí el subsecretario de Interior, Rafael Vera, y el director general de la Guardia Civil, el general José Antonio Sáenz de Santa María, fue sometido a consulta del Consejo de Ministros de esta República, que emitió un informe favorable al respecto."El Gobierno de Cabo Verde", dijo Pires, "estudió la petición española y analizó sus posibles implicaciones. De ambas, consideró que debía atender favorablemente la petición, por razones humanitarias y por razones políticas.

El primer ministro, Pires, de 50 años, se mostró en todo momento de la conversación con este periódico, que se desarrolló en su despacho oficial, como un profundo conocedor de la realidad interna de España y de su proceso democrático.

Entre otras cuestiones, valoró como muy "positivo" el pacto entre el PSOE y el Partido Nacionalista Vasco en el Parlamento autónomo de Euskadi, y se mostró convencido de que la cooperación entre Francia y España en materia antiterrorista puede conducir al fin de ETA.

La amenaza terrorista

En opinión de Pires, que ostenta, a su vez, la condición de secretario general adjunto del PAICV, su país no es indiferente a lo que ocurre en Europa, cuyas democracias, según sus palabras, se están viendo amenazadas cada día más por el fenómeno terrorista."Una situación estable en Europa occidental favorece, por un lado, la paz internacional, y por otro, las relaciones con otros países. Nosotros, por ejemplo, no fuimos indiferentes ante el proceso de democratización de España después de la muerte de Franco", añadió Pires.

"En aquellos años fuimos muchos los países, entre ellos Cabo Verde, que pusimos nuestros ojos en lo que estaba ocurriendo en ese país".

Comprobamos, con sorpresa de nuestra parte, cómo se producía la transición de un régimen a otro sin grandes sobresaltos. También nos sorprendió muchísimo la madurez con que las fuerzas políticas españolas encararon este proceso".

A juicio de Pires, que viajará a Madrid, en visita oficial, el próximo día 21 de febrero, "este proceso de democratización español siempre interesó a Cabo Verde, por cuestiones de orden político, y en esa medida, nosotros también estamos, creo, obligados a contribuir* a ello".

"Como no podemos ofrecer muchas cosas, el Gobierno de Cabo Verde analizó la petición española y accedió a ella, por lo que estamos a la espera de recibir desde Francia a este grupo de elementos de ETA, que gozarán aquí de la libertad de un confinado y podrán recibir las visitas de sus familiares".

Invitación al Rey

El primer ministro de Cabo Verde no conoce personalmente al presidente del Gobierno, Felipe González, "lo que no quiere decir que no nos conozcamos políticamente y sepamos cuáles son los objetivos de nuestros diferentes partidos"."Yo voy a viajar a España porque nos interesa crear una base de entendimiento, que sería consolidada con una visita de Su Majestad el Rey de España a Cabo Verde, a quien tengo previsto entregar una invitación en este sentido de mi presidente, Arístides Pereira".

Cabo Verde, en palabras de su primer ministro, es un país que no se precipita en su política exterior, sino que todo objetivo fuera de sus fronteras "se procesa con calma y seguridad", lo que, en su opinión, crea todas las condiciones para garantizar la continuidad de unas relaciones. "La visita que voy a realizar a España es, principalmente, política y proyectada sobre el convencimiento de que tras ella habrá mayor comprensión hacia Cabo Verde y se sentarán las bases para una futura cooperación económica".

"Nosotros nos consideramos vecinos de España, y es necesario que desarrollemos buenas relaciones de cooperación en este sentido, especialmente teniendo tan cerca Cabo Verde a las islas Canarias, una región muy similar en todo a nuestro país".

Interés por Canarias

"En este sentido, nos interesa conocer las realizaciones españolas en Canarias sobre varios dominios: agricultura, sistema agropecuario, irrigación de cultivos, formas de obtener agua y turismo, entre otras cuestiones".Pedro Pires, nacido en la isla del Fuego, fue, desde 1958 hasta 1975 -año en que Cabo Verde obtuvo la independencia de Portugal-, un activo luchador por la liberación de los pueblos africanos, Guinea-Bissau y su país, Cabo Verde, han marcado etapas importantes en su vida como prohombre de la independencia africana.

Amigo de Amílcar Cabral, el precursor de la independencia de Guinea-Bissau y Cabo Verde, Pires es un hombre considerado influyente entre los países africanos de habla portuguesa.

"No creo que España necesite de Cabo Verde para solicitar que otros países de Africa puedan, en un futuro, acoger a nuevos elementos de ETA expulsados por Francia. Y lo digo porque la política exterior española tiene su propia dimensión para trasladar estas cuestiones a otros países hermanos".

"No obstante, si se produjera alguna discusión, no dejaríamos de dar nuestra opinión o comunicación. Lo cierto es que no creemos que haya necesidad de que intervenga Cabo Verde".

El primer ministro de Cabo Verde es considerado en Praia, junto con el presidente Pereira, como un hombre activo que se ha comprometido, dentro de un esfuerzo colectivo que afecta a toda la población, a sacar este país hacia adelante y lograr trabajar en pro de unos recursos propios, la agricultura -hoy día su principal sostén-, que reduzcan la dependencia exterior. "Esperemos que España comprenda al Tercer Mundo y ayude a sus países".