Médicos progresistas manifiestan su preocupación por el retraso en la reforma hospitalaria
La falta de información y la confusión que existe sobre la reforma hospitalaria que ha iniciado la Administración sanitaria, y que afecta a 17.000 médicos, está produciendo una situación de perplejidad entre los médicos de la Seguridad Social, lo que facilita, según muchos de éstos, el progresivo deterioro en la asistencia. Todos coinciden en que hay que acabar cuanto antes con esta situación, tanto quienes rechazan frontal o parcialmente esta reforma (caso de la Organización Médica Colegial y la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos) como quienes la apoyan (UGT y Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública).
La pretendida reforma que cambiará radicalmente la estructura, organización y dedicación de los facultativos en los hospitales, se inició con la publicación en el Boletín Oficial del Estado el pasado 6 de diciembre con un real decreto sobre la provisión de plazas vacantes de personal facultativo en los servicios jerarquizados de las instituciones sanitarias de la Seguridad Social.Las medidas de este real decreto serán completadas con una batería de órdenes ministeriales sobre modificación de las actuales estructuras de los hospitales, acceso a puestos de responsabilidad y dedicaciones y complementos retributivos.
Es intención de la Administración hacer coincidir estas medidas con la aprobación -fuentes oficiales dicen nuevamente que es muy próxima- por el Consejo de Ministros del proyecto de ley General de Sanidad. Sin embargo razones especialmente de tipo económico, y debido a las presiones de sectores médicos conservadores y corporativos, parece que van a retrasar la publicación en el BOE de los aspectos de aplicación de esta reforma.
Apoyo y preocupación
Este es al menos el temor expresado ayer en una conferencia de Prensa conjunta por responsables de la Federación de Asociaciones para la defensa de la Sanidad Pública y, de la Federación de Sanidad de UGT, a pesar de que tanto la asociación como el sindicato mostraron su apoyo a esta reforma, al menos como fue planteada cuando se les consultó sobre la misma.Ambas entidades mostraron sin embargo su preocupación por el retraso que está sufriendo la publicación oficial de estas órdenes ministeriales que recogen la reforma y hablaron de deterioro, e incluso de caos, en los hospitales como consecuencia de este retraso.
Los representantes de UGT y de la APDSP aseguraron que al menos el 30% de los profesionales de la sanidad están de acuerdo con la reforma hospitalaria pero reconocieron que la falta de información y la confusión que existe en este sector está produciendo un clima muy propicio para las manipulaciones y en contra de la reforma.
Desde los sectores médicos conservadores la reforma hospitalaria está siendo fuertemente atacada. La Organización Médica Colegial, que preside Ramiro Rivera, va a ser especialmente beligerante en este tema, según ha manifestado un portavoz de esta entidad, "porque aunque en su contenido tiene algunos aspectos positivos, en su conjunto va a hacer un gran daflo a los médicos".
Segun ha escrito recientemente Ramiro Rivera estas medidas que van a conformar la reforma hospitalaria suponen por sí mismas una radical transformación de los hospitales "que se va a realizar de hecho antes de que se apruebe la ley general de Sanidad". Según el presidente de la OMC las normas propuestas limitan de tal manera la carrera hospitalaria que pura y simplemente acaban con ella. "Además, tratan de impedir que los compañeros que trabajan en los hospitales puedan ejercer privadamente".
Por su parte la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ha criticado la reforma hospitalaria tanto en su forma como en su contenido.
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