Un joven muere en una persecución policial tras ser sorprendido asaltando un comercio

Un joven de 28 años, Ricardo Moraledo, sin antecedentes, resultó muerto ayer por disparos de la policía en el curso de una persecución por el parque de Comillas, en Carabanchel, después de que la dotación de un coche patrulla sorprendiera a dos jóvenes asaltando una tienda de electrodomésticos. El hecho se produjo a las 13.30, cuando dos personas entraron en el comercio situado en la calle María Magdalena, 15, y, armados con una pistola, amenazaron al propietario.Según la Jefatura Superior de Policía, los asaltantes registraron al propietario, se apoderaron de 75.000 pesetas que tenía en la cartera y de otras 125.000 que había en la caja. A continuación exigieron al dueño de la tienda que seleccionara los dos vídeos y el compacto de música más caros y le obligaron a que los metiera en su propia furgoneta, aparcada en las cercanías.

En ese momento llegó un coche patrulla cuya dotación fue avisada de lo que ocurría por el propietario. El cabo salió del vehículo policial e inició la persecución de uno de los asaltantes. Durante la misma el asaltante disparó en tres ocasiones contra su perseguidor sin alcanzarle. En la esquina con la calle Condes de Barcelona el cabo escuchó un cuarto disparo. Según contaría después un inspector que se hallaba dentro de su coche, un joven le instó a que pusiera el coche en marcha. Al negarse, el joven disparó hiriéndo levemente al inspector en la región púbica.

En ese momento llegó el cabo que al ver cómo el atracador se volvía efectuó cuatro disparos, que alcanzaron al asaltante en el costado y pecho produciéndole la muerte. La Policía le intervino una pistola Browning, calibre 7,65.

Por otra parte un joven de 17 años resultó herido de un disparo cuando, junto a otras dos personas, salían de un banco que acababan de asaltar. Los delincuentes, que iban cubiertos con pasamontañas y armados con un revólver y una pistola que luego se comprobó era simulada, se habían apoderado de 543.000 pesetas en el Banco Español de Crédito, de la calle Ortega y Gasset, 55. Cuando salían fueron sorprendidos por la dotación de un coche patrulla, cuyos miembros efectuaron varios disparos, uno de los cuales alcanzó a J. O. L. M., de 17 años, en una pierna. Otro de los asaltantes fue también detenido, mientras el tercero huía con la mayor parte del botín pues sólo se recuperaron 36.000 pesetas.