Bayer fabrica en Tarragona un gas de la misma familia, pero menos peligroso

La factoría que la multinacional alemana Bayer tiene instalada en el término municipal de Tarragona fabrica un producto perteneciente a la misma familia del isocianato de metilo, gas tóxico que el pasado lunes provocó la muerte de más de 2.500 personas en la localidad india de Bhopal. El director de la Bayer en Tarragona, doctor Fernando Huidobro, ha admitido, en declaraciones efectuadas a EL PAIS, que el producto fabricado en la factoría de Tarragona, el diisocianato de tolueno, "es de la misma familia que el fabricado por la compañía Unión Carbide en la India, aunque cuenta con características totalmente diferentes".Las diferencias más importantes entre estos dos productos radican entre los respectivos puntos de inflamación y ebullición. Mientras el primero, el gas mortal de la India, se inflama a partir de los seis grados bajo cero y entra en ebullición a los 37 grados centígrados, el fabricado en Tarragona, también denominado TDI, se inflama a más de 132 grados centígrados y entra en período de ebullición a partir de los 250 grados. "Precisamente por el elevado punto de ebullición del TDI -sigue diciendo el doctor Huidobro- es muy difícil que este producto pasara del estado líquido al gaseoso en el hipotético y difÍcil supuesto de que lograra vencer los múltiples sistemas de seguridad que tenemos en la Bayer. Por lo tanto es totalmente imposible pensar en la formación de una nube tóxica al estilo de la producida en la India".

Desde la misma empresa se hace hincapié en la dificultad que tiene el TDI para explosionar teniendo en cuenta su elevado punto de inflamación que tiene que superar. El TDI es tóxico y se tiene que manipular teniendo presente las preceptivas normas de seguridad que existen al respecto.

Actualmente se fabrican en diversos países europeos como Portugal, Francia, Yugoslavia e Inglaterra. En Alemania Federal lo trata la misma multinacional Bayer.

En Bélgica la compañía Schell tiene una factoría Amberes; en Italia lo produce la compañía Monterison y en la Unión Soviética el producto es tratado por el propio Estado.