El embajador de Estados Unidos en Madrid, increpado en un debate sobre paz y desarme

Un grupo de unos 60 jóvenes de ambos sexos increpó ayer, con gritos de "¡Yanquies, asesinos!", ¡Nicaragua vencerá!' y "¡Fuera yanquies de América Latina!", al embajador de Estados Unidos en Madrid, Thomas Enders, cuando éste intentaba comenzar su intervención en un debate sobre Paz y desarme, organizado por el Ateneo madrileño.

La situación, que duró varios minutos -en el transcurso de los cuales algunos manifestantes consiguieron subir al estrado de oradores-, fue resuelta, en un primer momento, por el propio embajador Enders, quien recordó que "el Ateneo ha sido siempre un símbolo del empeño intelectual de los españoles", siendo aplaudido por otra parte del público.

Enders pudo así comenzar su intervención, frente a banderas sandinistas desplegadas por algunos espectadores. Pero volvió a ser interrumpido cuando explicaba que Estados Unidos está dispuesto a entregar a la URSS las nuevas tecnologías futuras de defensa espacial. Se oyó un grito de "¡Que se vaya ese asesino!" y risas secundadas por aproximadamente un tercio del público. Gritos de "¡OTAN no, bases fuera.'" acompañaron el final de la intervención del embajador de EE UU. Preguntas sobre Nicaragua, el hambre en el mundo y el gasto en armamento dieron pie a nuevos abucheos y gritos.

Enders, que permaneció hasta el final de los debates, intervino en el acto junto con los embajadores de Suecia, Carl George Crafoord, y de Yugoslavia, Bernislap Bardurian. El de la URSS, Yuri Dubinin, no asistió, aunque su participación estaba anunciada, porque, se encuentra en el extranjero, según explicaron los responsables del Ateneo. Dubinin no envió a nadie para que le representara en el acto.