El éxito de Mecano
Era la celebración del 50º aniversario de Radio Segovia (Cadena SER) en el frontón de la ciudad, un local frío, que se templó con el calor humano, y difícil para la sonorización. Pero se instalaron los mejores medios utilizables hoy de iluminación y sonido. Se distribuyeron para el evento 5.000 invitaciones que se aprovecharon al máximo: en la calle se quedaron cientos de jóvenes que ocuparon una cola de más de 150 metros. Era el éxito de Mecano.La fiesta segoviana comenzó con Hoy no me puedo levantar como primer tema, aquella canción que anunció hace más de tres años a Mecano y que directamente incluyó al trío en la historia minúscula de la musica pop española. Ana Torroja la cantó con entonación superior al pasado, impulsada por la mayor fuerza de los teclados de Nacho Cano, pletóricos durante todo el concierto. Las salidas a la primera línea de su hermano mayor, José, María, funcionaron para animar al público. Y había que hacerlo en el inicio. "Nosotros estamos mucho más contentos de ver a tanta gente", contestaba Ana a los clamores castellanos. José María cantó con ella su tema prometedor, Quiero vivir en la ciudad, rodeados de luces blancas destelleantes, de cámara portátil y de golpes continuos de tanta percusión: la potencia que nunca cede del preciso baterista, Arturo Terriza, y la constancia rítmica del bajista Esteban Cabezos, alias Spiro, por un lado; la preponderancia de los teclados más cualificados, sus aparatos accesorios y la batería electrónica de Nacho, por otro. En Hawaii-Bombay, Nacho acogió el bajo de Esteban y José protagonizó el número, su propia composición, con la base, el sintetizador. Es un tema que le señala, porque después, con la guitarra acústica y sentado, centró la admiración con su creación más notable, Aire, una letra exacta, muy inspirada e inspiradora. Era su confirmación.
Concierto de mecano
50º aniversario de Radio Segovia. Frontón de Segovia. Segovia, 8 de noviembre.
Y otra vez Ana. En La fiesta nacional y La estación se descubre: domina los altos, donde se recrea a su gusto, y el tono de voz engrandecido por su energía se muestra dispuesto a pasar de la aceptación al rechazo. La guitarra reapareció y destacó en una fase de Me río de Janeiro, acompañado por los de más -músicos y oyentes- y por la magna orquesta mantenida por las manos incansables de Nacho, que recogía la prioridad de volumen. Bajo y batería se declararon en un fuerte fragmento de Busco algo barato, una canción poco convincente, pero fácil y contagiosa que, con Me colé en una fiesta, empezó el apogeo entre los asistentes. Y es que Mecano es lo que es porque ha reproducido sus laureles con más sorpresas.
El final se acrecentó con la colaboración de Hans-Zinermann, que añadió teclas, y de Warren Cann, que, se sentó en una batería simple y mixta y se dejó ver, a los pies de Nacho, enaltecido en la gran tarima. "Ya no quiero más..., ya no puedo mas", cantaba Ana -que no cesaba en su ir y venir
y provocó el delirio de los asistentes, adolescentes la mayor parte, y la segunda petición de "otra, otra". Barco a Venus fue tarareada y coreada, Nacho bajó de su cúspide y su camiseta se perdió entre los bramidos quinceañeros.
Babelia
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