Los aceiteros acusan a Olcesa, con mayoría pública, de realizar competencia desleal

Los envasadores españoles de aceites comestibles han enviado una carta al presidente del Instituto Nacional de Industria (INI), Luis Carlos Croissier, en la que denuncian la "competencia desleal" hacia las empresas del sector que está realizando la empresa Olcesa, cuyo capital es mayoritariamente público. Los envasadores señalan en la carta al presidente del INI la deficitaria situación por la que atraviesa Olcesa, a la que acusan de perjudicar al sector privado con operaciones de pérdidas.Fuentes cercanas a la propia Olcesa han anunciado, según Comtelsa, una inminente operación acordeón de reducción de capital social de 580 millones de pesetas, con objeto de poder enjugar las pérdidas que ha acumulado en sus dos años de existencia. En el presente ejercicio, las pérdidas previstas son de 200 millones de pesetas, y es probable asimismo que se produzca una ampliación de capital de 1.050 millones de pesetas. En esta operación, Endiasa suscribiría 550 millones de pesetas, lo que le permitiría mantener el control sobre la empresa, ya que representaría el 52,38% del capital.

Nuevos accionistas

El resto, según los planes previstos, lo suscribirían la Caja de Ahorros de Cuenca, con un 19,04% (200 millones de pesetas); la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, con 17,14% (180 millones); la Caja Rural de Cuenca, con un 6,66% (70 millones), mientras que los agricultores de la zona de Tarancón, donde está ubicada la sociedad, adquirirán un 4,7% (50 millones de pesetas).En caso de que la operación se lleve a cabo, como todo parece indicar, desaparecerían del accionariado de Olcesa las empresas Elosúa y Carbonell, que ostentan hasta ahora el 2,2% y el 0,27% de la titularidad. Según esto, dejarían de participar en su capital la Diputación Provincial de Cuenca, la Caja de Ahorros Provincial de Guadalajara, la Caja de Ahorros de Albacete, la Cámara Agraria Provincial y UTECO.

Otra actividad prevista por Olcesa, según han señalado fuentes de los envasadores, es el plan para completar el circuito de refinado y envasado, plan que es calificado por los envasadores como una "huída hacia adelante", ya que a su juicio se puede traducir en nuevas inversiones que sólo servirán para incrementar las pérdidas".

"Es inexplicable", señalan en la carta enviada al presidente del INI, "que se pretenda completar el circuito productivo cuando el sector industrial transformador-comercial está ya sobredimensionado, en competencia de pura supervivencia y con resultados económicos, en la mayor parte de los casos, adversos".

Para los envasadores, Olcesa ha realizado importantes ventas de aceite ya refinado y envasado "en condiciones que ninguna otra compañía privada dedicada a esta actividad ha podido igualar".

En 1983, Olcesa tuvo unos ingresos de 2.950 millones de pesetas, y pérdidas de 547 millones.