El CESID espió a un profesor español que vivió en Polonia y organizaba ciclos sobre el cine del Este
Un funcionario policial dependiente del Centro Superior de Información de la Defensa (CESID), órgano que controla los servicios secretos españoles, espió, investigó y extrajo documentos reservados sobre las actividades de un profesor de instituto español, con domicilio en Segovia, porque había residido dos años en Polonia, donde trabajó como lector de castellano, y organizaba, a su regreso a España, cielos de cine de países de Europa oriental.
Este profesor se enteró de que su actividad era investigada, raerced a un fallo del propio agerte del CESID, y denunció formalmente el hecho a la policía, que ha optado por no trasladarlo a la justicia. El caso va a ser puesto en conocimiento del Defensor del Pueblo. Francisco Gozalo Viejo, de 31 años, licenciado en Filosofía y Letras y profesor de Historia, en la sección delegada en El Espinar (Segovia) del instituto nacional de bachillerato Andrés Laguna, recibió hace unos meses un extraño sobre en su domicilio, remitido desde Valladolid por una empresa de la construcción. En el interior figuraban su filiación policial (fotografía incluida) y un manuscrito que aportaba datos sobre él.
Se trataba de una carta enviada por el inspector del Cuerpo Superior de Policía Gabriel García Tejero, de 35 años, adscrito al CESID en Segovia, a su superior en Valladolid -ciudad de la que, militar y policialmente, depende Segovia-, el, subcomisario Luis Alberto Valverde López, de 45 años. Por un fallo en el número del apartado de Correos (puso el 309, que es el de una empresa de construcción, en vez del 3.091, que es del CESID) la carta no llegó a su destino, y sí, en cambio, por reenvío, a la persona sobre la que se aportaban los datos en el interior.
Los responsables de la empresa constructora -adonde equivocadamente llegó la carta- encontraron en ella, tras abrirla, y como única referencia, el domicilio incluido en la ficha de filiación (documento reservado que no puede ser extraído de las dependencia policiales), de Gozalo Viejo. Ante ello, por desconocimiento, y en un afán de que tuviera un destino seguro, la remitieron al profesor.
Un espía 'in albis'
Gozalo, sorprendido, denunció el hecho a la policía y se entrevistó en tres ocasiones con la gobernadora civil de Segovia, Cristina Martín Bustamante. Todos le recomendaron silencio, y, en el caso concreto de la gobernadora, con la justificación de que "podía perjudicar la imagen del Gobierno socialista". La carta, encabezada con un "querido amigo", decía: "Adjunto te remito lo relacionado con el festival de cine checoslovaco, cuyo principal promotor de todas estas cuestiones es el filiado que te adjunto. Costó trabajo localizarle, ya que ahora está como profesor en la localidad de El Espinar, en esta provincia. No pude mandar antes" (sic) "porque he estado ocupado, y además es que estaba equivocado, ya que el padre era efectivamente militar, pero capitán Gozalo Quintanilla" (sic), "que falleció hace tres años, aproximadamente. Este hijo siente grandes inquietudes con respecto a las culturas de todos los pueblos de tras" (sic) "del telón de acero y es antimilitarista. Con relación a los prosoviéticos, sigo in albis" (sic).
Los datos aportados por el agente secreto segoviano siguieron siendo incorrectos, porque el padre del profesor espiado no era capitán, sino comandante de Artillería, y no falleció tres años atrás, sino 10, precisamente días antes de la fecha prevista para que fuera ascendido por antigúedad a teniente-coronel. El agente que envió los datos es hermano del teniente de Artillería de complemento José García Tejero, de 39 años, antiguo alumno del padre de Gozalo y compañero de arma de un hermano del espiado, capitán, aunque éste estudió en la academia.
Gozálo Viejo trabajó entre 1978 y 1980 como lector de castellano, por convenio con la Universidad Autónoma de Madrid, en Katowice, zona minera situada al sur de Polonia.
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