Lluch anuncia una 'profunda' transformación de la industria farmacéutica y una subida de precios
El ministro de Sanidad y Consumo, Ernest Lluch, anunció ayer en una conferencia de prensa una profunda transformación de la industria farmacéutica española, que consistirá fundamentalmente en la adecuación a un sistema realista de costes y la revisión y actualización de los medicamentos, conocido como Programa de Selección y Previsión de Medicamentos (PROSEREME). El ministro dijo que la Comisión Delegada de Asuntos Farmacéuticos ha presentado una propuesta de elevación de precios de los productos farmacéuticos.
La subida anunciada por Lluch no se realizará con el sistema tradicional que se basaba en el coste de las materias primas, sino según la situación económico-financiera de cada empresa, con la que se negociará en función de una tasa de rentabilidad, a semejanza del sistema británico. La Administración se propone con ello, según el ministro, la adecuación de los productos a sus costes reales y no a los precios políticos que se han utilizado hasta ahora.El subdirector general de Establecimientos Farmacéuticos, Fernando Montoro, explicó que la fase tercera del PROSEREME afectará a unas 700 especialidades con el fin de evitar asociaciones medicamentosas perjudiciales. Se retirarán o reformularán en primer lugar aquellas especialidades en las que figure el cloranfenicol asociado a otros fármacos para uso sistémico (que afecta al organismo en su conjunto: vía inyectable, oral).
La misma medida afectará a los antiinfecciosos asociados a esteroides para administración sistémica, los antibióticos asociados con antitérmicos, analgésicos, tónicos cardíacos, analépticos, antihistamínicos e inmunoglobulinas, las que contengan oxifenisatina y aquellas en cuya composición figuren psicofármacos en asociación o penicilina para uso tópico (pomada, polvos, colirios) y uso rectal.
"Ley abierta"
Ernest Lluch dijo también que el anteproyecto de ley general de Sanidad será llevado al Consejo de Ministros el próximo mes de septiembre. Según el ministro, su departamento ya ha escuchado a todos los colectivos afectados y este mes se empezará a redactar el texto definitivo del anteproyecto. "Se pretende", afirmó Ernest Lluch, "que sea una ley abierta, que permita dos o tres salidas en muchos puntos y pueda ser desarrollada por los gobiernos autonómicos".La financiación de la sanidad pública fue otro de los temas a los que aludió el ministro. "Ésta debería realizarse a través de los impuestos generales del Estado y no por un impuesto particular, como es el impuesto de la Seguridad Social de trabajadores y empresarios", afirmó Lluch. Según el ministro hacia 1988 podría Iograrse en España la universalización de la financiación y de los servicios sanitarios.
Lluch anunció que próximamente se creará una red hemoterápica, integrada por centros de sangre regionales y provinciales, cuyas funciones serán, entre otras, la planificación y extracción de sangre en su área y promover la donación de la misma.
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