Una carrera espectacular
Carrera rápida y espectacular en ocasiones, la realizada ayer por los toros de la ganadería de Pablo Romero de Sevilla en el segundo encierro de los sanfennines-84 en el que no se registraron heridos de importancia. La masiva afluencia de corredores hizo que fuese difícil distinguir dónde se hallaban los toros.Las reses de Pablo Romero, que emplearon dos minutos y 41 segundos para recorer los casi 900 metros qué separan los corrales de Santo Domingo de la plaza de toros, salieron con mucha fuerza, lo que sorprendió a los mozos que tomaban parte en este encierro. La manada subió la cuesta de Santo Domingo muy estirada aunque en todo momento estuvo muy bien arropada por los cabestros.
En Mercaderes uno de los mansos resbaló, por lo que a partir de ese momento uno de los toros se colocó al frente de las reses. Pese a lo peligroso de la situación, la carrera continué limpia, sin incidentes y sin que los astados lanzasen derrotes. La anécdota del encierro se registró al derrumbarse la marquesina de una parada de autobús donde estaban numerosas personas.
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