Avalancha de implicaciones

"La aplicación de la informática a la medicina es un'hecho imparable, y si no nos incorporamos inmediatamente a esta realidad perderemos el tren del progreso para siempre", comentó Fernando González, presidente de la comisión gestora de la Confederación Iberoamericana de Bioingeniería, poco después de clausurarse la conferencia de Gijón.La tajante afirmación de González quedó plenamente contrastada a lo largo de estas jornadas. Así, el brasileño Fabricio Nigro hizo las delicias de los congresistas con la presentación de un método que permite la traducción automática y casi inmediata de cualquier texto al braille. Nigro presentó una experiencia basada en la adaptación al portugués, pero señaló que el sistema es válido para cualquier idioma. De las posibilidades de los ordenadores habló también Fernando Arriaga, catedrático de la facultad de Ciencias Exactas de Madrid, quien anunció que los ordenadores podrán autoprograrnarse muy pronto. Arriaga disertó sobre la memoria artificial y aseguró que los ordenadores de la quinta generación serán inteligentes. Con un método basado, asimismo, en su sistema cibernético, el chileno Luis Brille presentó un modelo sobre patología de la masticación, cuya utilidad para los afectados por el síndrome tóxico será planteada próximamente.

Otros recientes descubrimientos fueron un tonómetro para medir la presión intraocular y las repercusiones en los seres vivos de los campos electromagnéticos.