Europa decidirá en otoño si coopera con EE UU en la primera estación espacial permanente
Los 11 países integrantes de la Agencia Espacial Europea (ESA) responderán el próximo otoño a la oferta realizada por el presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, para cooperar con la Agencia Espacial Norteamericana (NASA) en la construcción de la primera estación espacial permanente, según manifestó ayer Wilhelm Brado, jefe de gabinete del director general de la ESA. Brado se encontraba en Barcelona con motivo de la participación de la agencia europea en la exhibición aeroespacial Cosmo-84, de la Feria Internacional de Muestras.
Brado afirmó que el próximo día 26 de junio se presentará a la reunión del consejo de la agencia el programa espacial a seguir a largo plazo, "en el cual se incluye la propuesta, con algunos condicionantes, de cooperar en el programa de la estación espacial permanente". Las condiciones del ejecutivo de la agencia son, en primer lugar, que se defina cuál va a ser la participación europea en los estudios previos y, en segundo lugar, que para participar "es preciso aumentar el presupuesto".Brado manifestó que había que distinguir dos fases: cooperación en el diseño de la estación -fase B- cuya decisión política se tomará el próximo otoño; y la fase C y D, de fabricación y ensayo de la estación, cuya decisión se tomará en 1985. Al margen de la decisión que pueda tomarse, el ejecutivo de la agencia opina que la construcción de esta estación espacial permanente "no es un programa prioritario" para la ESA.
"Europa tiene su programa propio que debe llevar a buen término", dijo Brado, tras señalar que la colaboración con la NASA en el proyecto citado "es interesante, pero que no debe perjudicar el programa europeo".
La Agencia Espacial Europea está trabajando en la ISPM (Misión Polar Solar Internacional) y tiene previsto lanzar el 15 de mayo de 1986 un sátelite, bautizado con el nombre de Ulises, para explorar por primera vez los polos solares, según informó Santiago Ximénez de Ferrán, ingeniero del programa científico de la ESA.
"No sabemos lo que vamos a encontrar, ya que existen distintas teorías al respecto, las que aseguran que no hay actividad en los polos solares y las que afirman que sí la hay", dijo. El Ulises será lanzado hacia Júpiter, cuyo campo de atracción le hará cambiar de órbita hasta conseguir salir del plano de la elíptica -hasta 85 grados, cuando hasta el momento sólo se había conseguido 15- y llegar hasta los polos solares, donde estudiará los campos de fuerza allí existentes.
Para 1985, la ESA lanzará otro satélite para el estudio del cometa Halley. Ésta será la primera ocasión en que un satélite estudia un cometa, de los que se desconoce su composición. El programa de la ESA para este fin se denomina Giotto, en homenaje 41 pintor florentino que pintó un cuadro sobre el portal de Belén en el que se aprecia una estrella semejante al cometa Halley, que aparece cada 75 años.
Según informó Alex Steciw, responsable de las misiones de telecomunicaciones, España podrá utilizar de forma experimental los canales de televisión del satélite Olympus, que será lanzado al espacio en 1987. Uno de los dos canales televisivos que tendrá el Olympus será para Italia y el otro para el resto de Europa, dijo Steciw, quien señaló que este sátelite tiene también otros usos en el aspecto de la telecomunicación. España participa en la ESA con cerca de 3.000 millones de pesetas anuales -un 4% de su presupuesto total- cifra que será ampliada a 4.000 millones para 1985 y 1986.
Para César Boente, delegado en la comisión administrativa y financera de España en la ESA, "nuestro país debería conocer más a fondo las posibilidades de la agencia, cuyo objetivo primordial es elevar el nivel tecnológico de las industrias". En opinión de Boente, "la agencia es un buen negocio para muchos de los países participantes", y lo podría ser también para España si se utilizasen sus posibilidades, en sectores como los de la radiofrecuencia, óptica, estructuras, ciencia de materiales, ciencia de la vida, energía solar, etc. Señaló que con la imposición del IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido) se podría paliar el esfuerzo económico que realizan las arcas del Estado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.