Tudela y Miguel Servet

En relación con la carta de J. F. Riaza en la que expone puntualizaciones acerca del texto del Ayuntamiento de Tudela en el que dice: "Es de señalar también la tesis acerca de la condición de judío de otro tudelano que murió en el siglo XVI, Servet, víctima de la Inquisición, por dar a conocer sus descubrimientos sobre la circulación menor de la sangre", he de aclarar que estoy de acuerdo con el señor Riaza en que no fue quemado por su texto sobre la circulación y que no fue la Inquisición española la que llevó a la hoguera al ilustre aragonés. Pero quiero matizar que, si no lo hizo, fue porque fracasó en su intento, toda vez que el Consejo de la Inquisición fechó el 24 de mayo de 1532, en Medina del Campo, las acusaciones contra Servet, que se encontraba en Alemania, una parte de cuyo texto dice así: "Tratar todas las vías posibles para reducir al dicho en España, convidándole con partidos u otras ofertas y que cuando por esta vía no se pudiera reducir, que se use del rigor". La Inquisición encomendó la tenebrosa embajada a su hermano, mosén Juan Serveto, ex capellán del arzobispo de Santiago. El 24 de julio de 1532, ya se documenta su estancia en Alemania. Fracasó en la misión de traer a España a su hermano. La Inquisición católica francesa le procesó y encarceló en Viena del Delfinado, de donde se escapó. Mandó una delegación a Ginebra a fin de que Calvino le entregase a Servet. La negativa condujo a que se le quemó, en efigie, en Viena. Por otra parte, Servet no nació en Tudela, sino en Villanueva de Sijena (Huesca), aunque al estar tan perseguido declaró en alguna ocasión ser de Tudela, pero firma sus obras como Villanovanus y se nacionaliza como Villeneuva y declara ser aragonés de Villanueva de S. / José Barón.