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Iberia tiene bloqueadas divisas en 15 países latinoamencanos y africanos por valor de 6.573 millones de pesetas

Iberia tiene bloquedas en el exterior divisas por valor de 6.573 millones de pesetas, producto de sus ventas de servicios en una quincena de países latinoamericanos y africanos. Del total de esa deuda, más de la mitad está concentrada en tres países: Venezuela, Nigeria y Guinea Ecuatorial, por este orden. Conseguir el cobro de esa deuda es un objetivo prioritario, por los problemas de liquidez que plantea, según fuentes de la compañía aérea española, que han admitido que "Iberia se ha planteado suspender vuelos a algunos países". Desde hace meses, las gestiones para materializar las transferencias se realizan en diversos frentes y al más alto nivel diplomático. Algunas compañías españolas han intervenido, con la autorización de la Dirección General de Transacciones Exteriores, en una operación triangular, para recuperar una parte de esos fondos.

La preocupación de los directivos de Iberia se centra en el crecimiento vertiginoso de los fondos bloqueados durante el último año, que ha coincidido con una apreciable caída del tráfico en esas zonas. Efectivamente, en enero de 1983 la deuda incobrada en el exterior representaba en su contravalor en pesetas 4.869,6 millones de pesetas, mientras que a finales del pasado mes ascendía ascendía a 6.573 millones, y eso después de haberse conseguido cobrar mas de 1.000 millones de pesetas que adeudaba México, cantidad que el banco emisor de aquel país congeló tras la devaluación (le 1982.La falta de disponibilidad de esos fondos agrava la delicada situación de liquidez de Iberia, como reconocen directivos de la propia sociedad. Aparte del riesgo creciente de estar sometida a nuevas devaluaciones en los países en que es acreedora, la compañía de bandera española se ve obligada a suscribir créditos adicionales, con lo que incrementa sus costes financieros.

Venezuela con más de 1.700 millones de pesetas adeudadas, Nigeria con 1.300 y Guinea Ecuatorial con 900 millones son los principales morosos. El resto, con cantidades que oscilan entre poco más de 100 millones de Paraguay, Bolivia e Irán, y los 700 millones largos de Guatemala, se reparte entre una docena de países. Además de los citados, Iberia ha prestado servicios no cobrados en El Salvador, Honduras, República Dominicana, Nicaragua, Brasil, Egipto, Argelia y Zaire. Si bien el ritmo de transferencias es irregular, todos estos países figuran en el ranking acreedor de Iberia desde hace más de un año, con excepción de Venezuela, cuyos problemas de pagos datan de agosto de 1983 y desde entonces se han ido agravando de manera creciente.

Mantener el valor de cambio

Con Venezuela se intenta negociar el mantenimiento del valor de cambio del momento en que fueron vendidos los servicios, tal como consta en el convenio sobre aviación civil que ambos países tienen suscrito. Como los servicios & tráfico aéreo no gozan de prioridad alguna en los pagos de deuda exterior, los deudores venezolanos tratan de pagar en dólares, de acuerdo al cambio del mercado libre. Actualmente éste está fijado en unos 13 bolívares por dólar, mientras que los servicios fueron pactados "como máximo a siete bolívares por dólar", lo que dejaría la deuda reducida casi a la mitad.

El problema de Venezuela es similar al planteado por México hace más de un año. Después de intensas negociaciones, en las que intervinieron los ministerios de Asuntos Exteriores y de Economía y Hacienda, se logró firmar un acuerdo, en base al convenio bilateral sobre transporte aéreo firmado en noviembre de 1978. De esta forma, Iberia logró recuperar la deuda a su valor de contrato y no al que derivaría tras la drástica devaluación, con un pago inicial de dos millones de dólares y siete plazos mensuales de un millón cada uno.

Aunque fuentes de Iberia reconocen que se ha planteado la posibilidad de suspender vuelos a algunos países, consideran que esta solución es altamente improbable, dados los especiales lazos económicos y políticos con esos Estados deudores y la complejidad e interdependencia de las relaciones comerciales.

La Dirección General de Transacciones Exteriores, dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda, ha dado su autorización a operaciones parciales encaminadas a recuperar parte de la deuda de Iberia, en las que han intervenido otras empresas españolas. Se trata de sociedades con algún contrato en esos países y con necesidad de efectuar inversiones allí. Para ello, Iberia transfiere parte de esos fondos retenidos y que no puede: repatriar, que son repuestos en España a la compañía aérea.

El perjuicio para Iberia es que cobra. divisas en pesetas, aunque, a cambio, según algunas fuentes, las compañías españolas que intervienen en la operación se ven liberadas de sacar divisas de España. En esta especie de trueque financiero triangular han intervenido algunas empresas de montaje, constructoras y un importante fabricante de vehículos todo terreno. Operaciones de este tipo se han realizado en Guatemala, República Dominicana, Costa Rica, Egipto, Ecuador, El Salvador y Argelia, entre otros países.

Problema extendido

La situación que padece Iberia no es única. Las 120 compañías integradas en la IATA (Asociación del Transporte Aéreo Internacional) tienen actualmente contraídas deudas que se aproximan a los 800 millones de dólares (120.000 millones de pesetas). La información es confidencial y no es dada por las compañías para evitar los posibles perjuicios comerciales. El comité financiero de la asociación despliega intensas gestiones para recuperar esos fondos, que en un 82% corresponden a países africanos, en un 5% a América Latina, en un 4% a Asia y en un 9% a países de Oriente Próximo. La proporción para Iberia se invierte y más de un 60% de su deuda está localizada en el área latinoamericana, por los especiales vínculos con esos países.

La crisis económica que afecta a los países en vías de desarrollo y la renegociación de su deuda exterior ha perjudicado notablemente a las compañías de aviación civil. Las deudas globales de las compañías asociadas a IATA han pasado de 350 millones de dólares en 1979 a 800 millones a finales de 1983.

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