La policía examina una cuenta bancaria en Galicia, en relación con la puesta en libertad de Bardellino

El grupo de la Policía Judicial que tiene encomendadas las diligencias sobre la irregular puesta en libertad del mafioso de la Camorra napolitana, Antonio Bardellino, Tonino, ha investigado una cuenta corriente que Josefa Suárez, la Pepa, mantiene abierta desde hace tiempo en un banco de Galicia, sin que, hasta el momento, se conozca el resultado de esas gestiones. En medios policiales ha resultado extraño que Josefa Suárez, que vive constantemente en Madrid, mantuviera abierta una cuenta corriente en Galicia.La policía ha investigado infructuosamente varias cuentas corrientes de otras personas supuestamente relacionadas con el caso y siguen la pista de los 10 millones de pesetas que fueron entregados a la Pepa, quien mantenía relaciones sentimentales con el magistrado del Supremo, Jaime Rodríguez Hermida, suspendido de sus funciones provisionalmente por su presunta implicación en el caso Bardellino.

Según fuentes próximas al jefe de la Camorra, los 10 millones fueron entregados a Josefa Suárez y a su amigo Luis Plana Terraza, alias el Catalán, en dos partes: una, días antes de la puesta en libertad del mafioso italiano y la segunda el mismo día de su puesta en libertad junto a un banco de la calle de Alcalá.

Asimismo, los servicios de seguridad de la región gallega están investigando la relación del magistrado del Tribunal Supremo Jaime Rodríguez Hermida, con varios contrabandistas gallegos a quienes conocía, entre ellos Laureano Oubiña Piñeiro, procesado por delitos de contrabando y quien, actualmente, reside en Suiza. La investigación de los servicios gallegos sobre la posible relación del magistrado del Supremo con contrabandistas es independiente de la que está instruyendo la policía madrileña sobre su presunta implicación en el caso Bardellino.

Sobre la posible relación del magistrado del Supremo con contrabandistas gallegos y, ante el interés que demostró Rodríguez Hermida por varios sumarios sobre contrabando en Galicia, los dos jueces que instruían estos sumarios en 1983, uno en Pontevedra y otro en Cambados, han asegurado a EL PAIS que el magistrado visitó las dependencias judiciales, pero "nunca nos presionó en modo alguno".

Relaciones con contrabandistas

Fuentes policiales de toda solvencia avalan que el magistrado Rodríguez Hermida mantenía estrechas relaciones con varios contrabandistas gallegos.Rodríguez Hermida, según un informe de la Guardia Civil, visitó al juez de instrucción de Pontevedra, Antonio Gutiérrez Población, encargado del caso 66/83 para interesarse por las diligencias abiertas a la organización contrabandista Los Servandos, de Bueu, en cuyo sumario aparece implicado Laureano Oubiña, a quien conocía personalmente. También "demostró su interés personal y directo en la consecución del indulto concedido a Oubiña, que cumplía condena de cuatro años, dos meses y un día por cohecho en la prisión provincial de Pontevedra".

El magistrado del Supremo también se interesó ante el juez de Cambados, José Luis Seoane, que se ocupó de las diligencias contraguardias civiles de O Grove, acusados de cohecho y contrabando, y de destacados contrabandistas de la organización R.O.S. (Ramiro-Olegario-Sito). José Luis Seoane, ahora destinado en Gijón, manifestó que Rodríguez Hermida "había visitado algunas ocasiones las dependencias judiciales, pero nunca me presionó".