La evacuación de enfermos graves por vía aérea

El transporte habitual de enfermos graves carece en nuestro país de soluciones opuativas. Con frecuencia ocupa las páginas de sucesos algo que debiera estar desprovisto de excepcionalidad. Grandes quemados, traumatismos craneales, recién nacidos de alto riesgo, etcétera, son problemas en los que la supervivencia adecuada sólo puede conseguirse llevando al paciente a centros asistenciales terciarios.En la actualidad, los medios utilizados incluyen a las compañías de vuelos comerciales, la colaboración inestimable del Ejército del Aire y algunas precarias contribuciones de empresas privadas de ambulancias.

Las compañías aéreas disponen en sus vuelos regulares de camillas de transporte de enfermos, si bien los horarios y la presencia a bordo de otros viajeros dificulta la atención a un paciente grave durante el vuelo.

El Ejército del Aire, a través de su Servicio de Búsqueda y Salvamento (SAR, Search and Rescued), ha venido cubriendo el transporte de enfermos graves con encomiable dedicación, a pesar de que tal función sólo está incluida marginalmente entre sus obligaciones.

La contribución de las empresas privadas de ambulancias es siempre marginal y mediatizada por condicionamientos económicos. El transporte de enfermos graves bien pudiera considerarse una actividad de defensa civil, y teniendo en cuenta que las necesidades no son exactamente iguales en las distintas áreas geográficas del Estado, una solución podría ser la creación de servicios de transporte de enfermos por vía aérea dentro de las comunidades autónomas y a cargo de las mismas, ya que las competencias de defensa civil están siendo transferidas.

La otra forma de abordar el problema puede ser asignar esta tarea a un servicio de ámbito estatal con la creación de un servicio con estructura y estatuto similar al servicio contra incendios forestales de Icona. Mucho más simple y, desde luego, factible, es asignar de una forma oficial y concertada la tarea al Servicio de Búsqueda y Salvamento del Ejército del Aire. Éste cuenta con parte de los medios y del personal: los aviones y los pilotos. Una solución efectiva de las evacuaciones no es sólo una mejora sanitaria para las víctimas que eventualmente lo precisen, sino un remedio adecuado para la angustia habitual del enfermo menos grave que, por razones geográficas, como ocurre en las islas, se encuentra distante de centros de atención sanitaria superion/

Médico.