Felipe González aplaza su viaje a Arabia Saudí para permitir una mejor preparación de la visita

El rey Fahd de Arabia Saudí pasará unos días de descanso en Marbella antes de que el presidente del Gobierno español, Felipe González, realice el viaje a aquel país que tenía previsto emprender el próximo día 5, y que ayer fue oficialmente aplazado. El motivo de la demora del viaje, según explicaron fuentes oficiales, se debe al deseo de preparar a fondo los temas a discutir en Riad, capital del Estado saudí. Por otra parte el presidente debería enlazar este viaje con su regreso de Venezuela. España intentará vender a Arabia armamento y tratará de conseguir un crédito blando que ayude a solucionar los actuales problemas crediticios.

El aplazamiento del viaje que tiene previsto realizar Felipe González a Riad "no tiene ningún misterio detrás", afirmaron ayer en la Oficina de Información Diplomática, y en el mismo sentido se manifestaron en la oficina del portavoz,del Gobierno. El director genenal de Relaciones Económicas Internacionales, Carlos Blasco, regresó de Riad hace dos días, en donde estuvo estudiando algunos de los temas que habrá de tratar el presidente del Gobierno, y tanto en este departamento como en la Secretaría General de Comercio se considera que la demora era obligada, dado que todos los problemas técnicos de los temas a tratar requieren un estudio más profundo.

Venta de armas

Arabia Saudí concedió ya dos créditos al Reino de España y uno a Renfe. El que ahora se quiere obtener, también con garantía del Estado, se desea establecerlo con varias entidades de las que poseen aval estatal. Uno de los acuerdos que se quieren establecer es convertir al Banco Exterior en depositario del banco central saudí. Por otra parte, existe la intención de relanzar al Saunds Bank, en el que tienen intereses compartidos España y Arabia Saudí.La última gran operación favorable para España fue la venta de armamento que se firmó, por un total de 150 millones de dólares, con motivo de la visita del príncipe Sultan. Recientemente, Arabia Saudí realizó una gran operación de compra de armamento en Francia, pero se estima que España está en condiciones de ofrecer otros productos de este tipo, complementarios de los vendidos por París. Entre los proyectos conjuntos figura el montaje de una fábrica de explosivos, en la que España aportaría su experiencia en este campo.

En lo tocante a la exportación, las empresas españolas no tienen otros problemas que los derivados de la ausencia de representantes en aquel país. Entre España y Arabia Saudí no existen trabas comerciales, pero se trataría de conseguir, en este viaje presidencial, potenciar las misiones de las empresas privadas de los dos países.