Aumenta en la CEE el número de niños víctimas de envenenamientos en su hogar

El número de niños víctimas de envenenamiento en los 10 países miembros de la Comunidad Económica Europea, a causa principalmente de intoxicaciones y quemaduras provocadas por productos caseros de limpieza y medicinas, es cada vez mayor. El Parlamento Europeo ha votado en Estrasburgo una resolución que recomienda mayor seguridad en los cierres de los envases que contienen productos susceptibles de causar la muerte a los niños.Según una encuesta de la Comunidad Económica Europea, los reglamentos sobre los cierres de seguridad varían de un país a otro, mientras que en Estados Unidos la reglamentación es uniforme y eso evita envenenamientos.

Algunos países carecen incluso de reglamentación, y en ellos el peligro es mayor para los niños. En Francia, en 1979, 500 niños murieron por envenenamiento al ingerir productos que no les estaban destinados, pero que se encontraban a su alcance (medicinas, el 45,5%; productos químicos, el 18%, y artículos de limpieza, el 15%). El Centro Antiveneno de Bélgica recibe unas 50 llamadas diarias relativas a envenenamiento de niños, mientras que en el Reino Unido, durante las primeras semanas de 1983, el Guy's Hospital de Londres recibió 3.192 llamadas sobre accidentes cuyas víctimas eran niños.

El Centro Antiveneno Nothuf, de Munich (RFA), recibió en 1981 más de 15.000 llamadas, la mitad de las cuales se debían a accidentes sufridos por niños que bebieron medicamentos, productos de limpieza, insecticidas, etcétera.

Quinientos niños pequeños perdieron la vida en Francia, durante el año 1979, por haber tomado esos productos, mientras que 2.500 han quedado con dolencias permanentes por la misma razón.

Los colores atractivos constituyen la principal causa que mueve a un niño a abrir un envase conteniendo un producto que, casi siempre, traga a continuación. Por ello, la resolución del Parlamento Europeo recomienda a los laboratorios médicos y farmacéuticos de los 10 Estados miembros que procuren poner colores menos llamativos en los botes y etiquetas.