González informará hoy al Congreso sobre las dificultades para el ingreso de España en la CEE

El presidente del Gobierno, Felipe González, informará hoy al Congreso de los Diputados de las dificultades surgidas en el proceso de negociación para el ingreso de España en la Comunidad Económica Europea por la reciente aprobación del reglamento agrícola de frutas y verduras, que daña considerablemente los intereses comerciales españoles. El líder del grupo mayoritario de la oposición, Manuel Fraga, achacará el poco avance que se está produciendo en la resolución de los problemas bilaterales a la falta de claridad y de definición de la política exterior del Gobierno.

Fuentes de la presidencia del Gobierno y de Alianza Popular negaron que Felipe González y Fraga trataran, durante la entrevista que ambos líderes mantuvieron ayer, temas de política exterior y del debate parlamentario que comienza hoy. En fuentes aliancistas se ignoraba anoche si Fraga, que será el único que hable por su partido en el debate de hoy, pedirá la dimisión del ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán, aunque sí se esperan duras críticas a su labor durante los últimos 10 meses.Según ha podido saber EL PAIS, el presidente del Gobierno, Felipe González, demorará todavía unas semanas el envío de una carta personal a los jefes de Estado y de Gobierno de los 10 países miembros del Mercado Común europeo para conocer si existe o no la voluntad política de ampliar la CEE a España y Portugal y en qué fecha concreta. La carta, anunciada por Felipe González durante su reciente viaje a Italia y Grecia, tiene como destinatario final la cumbre semestral de la CEE, que tendrá lugar en Atenas a partir del 6 de diciembre.

No existe borrador

Fuentes oficiales de Presidencia del Gobierno y de la secretaría de Estado para las Relaciones con las Comunidades Europeas informaron ayer que aún no existe un borrador de la carta. Por una parte, quedan aún varias reuniones ministeriales de los diez antes de Atenas, y el Gobierno desea conocer el grado de aceptación que ha tenido en las capitales del Mercado Común la reciente aprobación de los reglamentos agrícolas, que imponen unas condiciones muy duras a la negociación de los productos hortofrutícolas españoles. En segundo lugar, al haber pedido el Gobierno de Lisboa concertar con España este tipo de requerimiento informativo, se espera que Felipe González y Mario Soares discutirán el texto de la carta en la reunión de alto nivel que celebrarán en la capital portuguesa los días 11 y 12 de noviembre.El presidente español envió una carta a sus colegas de los diez en junio, antes de la cumbre de Stuttgart, pero en aquella ocasión la respuesta comunitaria, de la que luego se echó atrás Francia, condujo a una expectativa falsa por parte de España, que creyó que cualquier reforma de la agricultura y de la financiación de la CEE sería simultánea a la aprobación de la ampliación.

Fuentes gubernamentales están convencidas de que, ahora más que nunca en el largo proceso negociador español, la llave de nuestra entrada en la CEE la tiene París, y, en concreto, el Gobierno socialista de François Mitterand, que ocupará la presidencia del Consejo de Ministros comunitario de enero a junio del próximo año. Por esta razón, en el palacio de la Trinidad se ha silenciado la crítica pública a Francia después de la decisión agrícola del día 18 y, en privado, se empieza a pensar ya en una aproximación comercial al vecino del Norte con un paquete global de contratos que consiga retirar el veto francés a nuestro ingreso.

En el tema del Mercado Común, el Grupo Popular se muestra escéptico. "Creemos que lo fundamental es preparar la economía española para poder ingresar bien en la CEE, en la que sin duda vamos a ingresar, pero que va a ser dentro de unos años distinta a la Comunidad Económica Europea que existe ahora", declaró ayer Guillermo Kirkpatrick. Sin embargo, para el Grupo Popular el problema estriba en que no "existe una línea clara del Gobierno sobre la OTAN, y ello está impidiendo que avancemos en otros temas de política exterior".