Alcaldes comunistas exponen su desacuerdo con el proyecto de ley de Régimen Local

Los alcaldes comunistas integrados en la Federación de Municipios y Provincias de España, que se reunieron ayer en Santa Coloma de Gramenet expondrán a la asamblea de este organismo, que se celebrará hoy en Barcelona sus importantes desacuerdos con el anteproyecto de Ley de Régimen Local, recientemente aprobada, por el Consejo de Ministros, y su negativa a que la aportación de los recursos del Estado a los municipios sea inferior al 10% para 1984, y la necesidad de cambiar la estructura de la Federación para pasar a hacer una confederación porque se ha demostrado que la actual no funciona.El alcalde de Córdoba, Julio Anguita, manifestó que "lo que propondremos será lo que siempre hemos pedido conjuntamente los socialistas y comunistas antes de su llegada al Gobierno. Pero ahora se ha producido un desenganche del Gobierno, no de los alcaldes socialistas con los que básicamente seguimos manteniendo las mismas posturas, y las últimas medidas que ha tomado reflejan una concepción del Estado distinta a la que refleja la Constitución".

Para Anguita, a partir de esta ley el Gobierno recauda, transfiere, servicios deficietarios a los municipios, pero no les transfiere el dinero correspondiente. Se mantiene la tutela sobre los ayuntamientos y les dice: "Te quito dinero y te lo buscas gravando al ciudadano".

Tutela y desconfianza

Continuando sobre la futura Ley de Régimen Local, Anguita manifestó: "Ya he dicho en varias ocasiones que los ayuntamientos de Franco tenían dos principios elementales, el principio de la tutela y el de la desconfianza. Ambos se mantienen en esta ley, y además persiste la figura del alcalde como un fuerte presidente con facultades omnímodas que se asemejan a la de los alcaldes de épocas anteriores". También criticaron los comunistas las actuaciones individuales realizadas por los alcaldes socialistas de Madrid, Barcelona y Valencia para conseguir dinero del Gobierno central.Jordi Cunill, responsable de Política Municipal del PSUC afirmó que los puntos de discordancia no pueden interpretarse como una descalificación global de la política municipal del Gobierno socialista y sobre la elección del nuevo presidente de la Federación de Municipos, cargo al que los comunistas anunciaron que no presentarán candidatura, indicó que apoyarán al candidato socialista "siempre que no sea un correvidile del Gobierno sino un interlocutor de los ayuntamientos ante el Gobierno".

Antoni Farrés añadió: "Yo pienso que antes que la militancia y que la disciplina de los partidos está en primer lugar la defensa de los ciudadanos, y cuando nos dejan expresar nuestras necesidades decimos que es necesaria la aportación de un mayor porcentaje de recursos para los ayuntamientos, lamentando que en ocasiones los socialistas se encuentran limitados por las orientaciones o la displicana de su partido. Yo espero que este fin de semana la disciplina de partido quede relegada en beneficio de la defensa de los intereses globales de toda la población. Pero desconocemos cuál va a ser la postura de los socialistas".