Dos niños, hospitalizados en Barcelona con síntomas de desnutrición y malos tratos

Dos hermanos Alberto, de tres años, y Javier, de nueve -meses- han ingresado en el hospital Sant Joan de Deu con evidentes síntomas de desnutrición y, según testigos del traslado, con notorias huellas de malos tratos. La policía, que había sido advertida por los vecinos de las condiciones infrahumanas en que vivían los chicos, detuvo al padre. Alicia Flores, la madre, sigue deambulando por las calles del distrito V, acompañada de su tercer hijo, Emilio, de siete años. Alicia tiene un cuarto hijo que vive en Badajoz con su hermana. Su primer hijo murió de, hambre.El matrimonio, formado por, Juan y Alicia y sus tres hijos, vive¡ desde hace tres años en el número; 32 de la calle Rosales, muy cerca de El Molino. En este tiempo no pasaron inadvertidos para el resto, de familias domiciliadas en el inmueble. "Son gente que niáenten ni consienten", según los definía ayer Paquita, la vecina del mismo rellano de la escalera.

La situación empeoró en los últimos tres meses. El llanto de hambre de los dos niños pequeños se convirtió en clamor. Los irecinos decidieron intervenir, aunque hubo que superar algunas reticencias iniciales debidas a posibles represalias. La gota que colmó el vaso la proporcionó Paquita, quien, observando a través de la mirilla de la puerta, pudo apreciar al pequeño de nueve meses tendido en el suelo. Llamaron anteayer a la policía.

A las 18.30 horas, aproximadamente, Alicia Flores, de 32 años, no se encontraba en casa. Ni ella, ni su hermana gemela que últimamente frecuenta el piso, ni Emilio, su hijo predilecto que acompaña a ambas en sus correría. La policía llamó a los bomberos para que echaran la puerta abajo, lo que hicieron con prontitud. El pequeño Javier ya no lloraba. Las testigos, Paquita y Magdalena, observaron con atención el escenario de miseria en el que se hacía difícil respirar. Los agentes de la policía intentaban contener la respiración en un ambiente dominado por el hedor.

'"La ropa sucia de los niños estaba esparcida por el suelo, el balcón permanecía cerrado como siempre, debía hacer años que no se limpiaba nada", recuerdan las testigos. Cuando estaban sacando a los niños en brazos para trasladarlos al hospital, llegó el padre. Identificado, resultó pesar sobre él una orden de búsqueda y captura.

La madre regresó a casa y reaccionó violentamente. Amenazó, con denunciar a la policía por "haberme robado a mis hijos", e insultó a sus vecinos, que pocas horas antes firmaron un documento en el que se acusa a Alicia de malos tratos y abandono de sus hijos. Unas, horas más tarde, comprobaron que volvía a la calle.