La viuda de Azaña requiere al Ayuntamiento de Alcalá que reconozca su derecho sobre una finca

María Dolores de Rivas Cherif, viuda de Manuel Azaña, presidente de la II República española, ha presentado requerimiento notarial al Ayuntamiento de Alcalá de Henares en el que reclama la parte que le corresponde por la venta de una finca, propiedad de los hermanos Azaña, donde la corporación quiere crear un parque natural y un vertedero controlado. Dolores de Rivas no figura en el Registro de la Propiedad como titular de ningún derecho sobre el terreno vendido, al habérsele aplicado la ley de Responsabilidades Políticas a su marido en 1942, lo que provocó la segregación de una parte de la finca.

La segregación fue inscrita en el registro 19 años más tarde, sin que se conozcan los motivos de este retraso, y sin tomar en cuenta que 16 años antes, en 1945, se había declarado a la viuda exenta de responsabilidad, por lo que se le devolvieron sus bienes.El descubrimiento de esta situación, según informó desde Roma Enrique de Rivas, sobrino de la viuda de Azaña, fue debido a la compra por parte del ayuntamiento, de mayoría socialista, de la finca conocida popularmente como Los barrancos de Azaña. La finca se convertirá en un parque natural, excepto una parte que será dedicada a vertedero controlado de basuras.

"El ayuntamiento consultó el Registro de la Propiedad y comprobó que allí figura la finca a nombre de los sobrinos carnales de Azaña", manifestó Enrique Castillo, secretario general del ayuntamiento. "De ella se habían segregado dos partes que habían sido vendidas. Una tercera parte figura a nombre de la viuda de Azaña como usufructuaria. Como parecía que había problemas con esta última finca, y además tiene una parte ocupada por una concesionaria minera, el ayuntamiento decidió no comprarla de momento y adquirió la de los sobrinos y la colindante que no tiene relación con la familia". Una vez efectuado el primero de los dos pagos acordados, se recibió el requerimiento notarial de Dolores de Rivas.

Inscripción tardía

"En mayo de l945", informó De Rivas, "se declara a la viuda de Azaña exenta de responsabilidad y se le devuelven sus bienes. Sin embargo, nos hemos enterado ahora de que la segregación se mantuvo, con lo que Dolores de Rivas no es considerada usufructuaria parcial de la totalidad de la finca, sino de un determinado pedazo del terreno, lo que lesiona sus intereses. La segregación quedó inscrita en el Registro de la Propiedad el 7 de abril de 1961, sin que sepamos a qué se debió el hecho, 19 años después de la decisión que lo motivó".

El ayuntamiento ha ofrecido a la viuda del escritor y político la posibilidad de estudiar el expediente, mientras espera que el tema sea revisado por los jueces. Manuel Azaña nació en Alcalá de Henares en 1880 y falleció, exilado en México, en 1940. Con motivo de su centenario, el Ayuntamiento de Alcalá descubrió hace tres años una placa de homenaje en su casa natal.