Ambiente de crisis en el Congreso de Estados Unidos por el incidente del Boeing
El Congreso norteamericano reanudó ayer las sesiones de trabajo, después de cinco semanas de vacaciones, bajo un ambiente de crisis provocado por el ataque soviético al avión civil surcoreano, la escalada de violencia en Líbano y la situación en Latinoamérica. Congresistas y senadores deben también afrontar los problemas de política interna, de orden económico en general, durante una legislatura que se verá marcada por la campaña preelectoral que concluirá con la elección presidencial en noviembre de 1984.Una de las primeras tareas del Congreso será la aprobación de resoluciones condenando la acción de la URSS por el derribo del avión surcoreano. Los debates servirán de tribuna para que los conservadores norteamericanos continúen sus críticas hacía el presidente Ronald Reagan, a quien acusan de débil en sus medidas.
Aunque EE UU reconoció que los cazas, soviéticos lanzaron cohetes de advertencia contra el avión surcoreano -lo que contradice la primera versión facilitada por EE UU-, el Departamento de Estado dijo que ello no justifica el verdadero sentido de la tragedia. Moscú rechazó ayer sendas notas de Washington y Seúl solicitando reparaciones por la muerte de los norteamericanos y coreanos que murieron en la tragedia.
