El ministro de Defensa conocía y autorizó el viaje a Suráfrica del teniente general Ascanio

La Dirección General de Relaciosnes Informativas y Sociales del ministerio de Defensa aseguró ayer a EL PAIS que a finales de julio el titular del departamento, Narcís Serra, tuvo conocimiento y autorizó el viaje del jefe del Estado Mayor del Ejército (JEME), Ramón Ascanio Togores, a Suráfrica, realizado del 1 al 11 de septiembre atendiendo a una invitación de su colega el general J. Geldenhuys. Como es práctica establecida en los viajes oficiales de los altos cargos hubo una comunicación al ministerio de Asuntos Exteriores que en este caso se cursó desde la subsecretaría de Política de Defensa a la Dirección General dé Política para África y Asia Continental.En esos términos de "viaje oficial" difundió la agencia Efe las primeras noticias del viaje del general Ascanio el 1 de septiembre. El intento de privar a la visita de ese carácter no se instrumentó, a través de la agencia Europa Press, hasta el día 5, 72 horas después de la "nota de extrañeza" emitida por' el secretariado del PCE. Observadores políticos consideran que el desplazamiento del jefe del Estado Mayor durante diez días a Suráfrica resulta todavía menos justificable bajo la etiqueta de "viaje personal", y subrayan que, desde su nombramiento el 16 de enero de 1982 sólo ha viajado fuera de España para asistir a unas maniobras de la OTAN, el 17 de septiembre de 1982, en la República Federal de Alemania, y el 3 de mayo pasado a Lisboa, para corresponder a una invitación de su colega portugués.

El JEME se encontraba ayer en Zaragoza para asistir a las maniobras combinadas Azor 81, donde participan la Brigada Aerotransportada y unidades paracaidistas de la República Federal de Alemania. Allí, al pedirle Radio Nacional de España en Aragón una valoración sobre su reciente viaje a Suráfrica, Ascanio manifestó que "como ya indicó oportunamente el Ministerio de Defensa, se trata de un viaje no oficial, de carácter privado, que contaba con el conocimiento y autorización de mi ministro, que estaba perfectamente al tanto. Un viaje eminentemente profesional, en el que me limité a visitar algunas instalaciones y unidades del Ejército surafricano en Suráfrica. Solamente a esto".

"Desde ese punto de vista, teniendo en cuenta las peculiaridades que tiene ese país, en cuanto se refiere al tipo de conflictos y amenazas con las que se ha enfrentado, pues, no cabe duda que de ahí se deriva una peculiar estructura de su Ejército que, en ciertos aspectos, es interesante conocer".

El corresponsal de EL PAIS en Zaragoza, Javier Ortega, informa que el jefe del Estado Mayor del Ejército, Ascanio Togores, presenció los ejercicios Azor 83 en el campo de San Gregorio acompañado por los capitanes generales de la V y VIII Regiones Militares, representantes del mando del Transporte Aéreo de la III Región y observadores de los ejércitos alemán y norteamericano.

En el desarrollo de los mismos participaron -con fuego real, napal, bombas y cohetes- 3.500 hombres, 350 vehículos y 50 piezas de armamento pesado, y completó el ejercicio una exhibición de la patrulla de helicópteros. Debido al fuerte viento reinante no se pudo realizar plenamente lo previsto, ya que tuvo que suspenderse el lanzamiento de paracaidistas.

Como novedad, por primera vez, la Brigada Aerotransportable, que trasladó a los participantes en las maniobras desde Galicia, pudieron aterrizar directamente en el campo de San Gregorio, ya que a tal efecto se había construido una pista de aterrizaje de un kilómetro de larga.

El ejercicio de aerotransporte, según el teniente general Ascanio Togores, es "costoso, pero necesario para comprobar el adiestramiento de la unidad". En unas declaraciones a los medios informativos aseguró que este ejercicio combinado con la participación de fuerzas alemanas y norteamericanas "no significa un paso más hacia la integración de España en la OTAN; las maniobras están al margen. Estos ejercicios conjuntos se vienen realizando desde hace años y son de una gran importancia para el Ejército español".