La oposición planteará la moción de censura contra el Gobierno de Felipe González en el actual período legislativo

El Grupo Popular tratará de llegar a plantear una moción de censura al Gobierno en los próximos meses. Previamente planteará la reprobación de Miguel Boyer y Fernando Morán. El PSOE tardó poco más de un año en presentar una moción de censura contra Adolfo Suárez tras las elecciones de 1979. En el debate del próximo día 20, la oposición se va a limitar a discutir lo que ha hecho el Gobierno y lo que piensa hacer. Dentro del próximo curso legislativo insistirá en la necesidad de mantener dos debates fundamentales: uno sobre política exterior y otro sobre economía. El partido de la oposición considera caóticas las líneas maestras del Ejecutivo en ambas materias. Con el Pleno del Congreso dedicado a la ley del Aborto, Manuel Fraga cargará todas sus baterías.

Según Jorge Verstringe, la oposición que hasta ahora ha protagonizado su grupo parlamentario ha estado basada fundamentalmente en la necesidad de reforzar y mantener el régimen democrático.Nosotros", afirma, "no nos hemos propuesto un acoso y,derribo del Gobierno sino más bien hemos tratado de ayudar a corregir errores. Nuestro mayor interés no ha estado basado en la destrucción sistemática de lo que se hace". Según el secretario general de: Alianza Popular, desde dentro del partido la labor desarrolada hasta ahora ha sido considerada suave y, el hecho de que desde fuera se haya entendido como dura, hace pensar que se ha alcanzado el punto correcto.

Alianza Popular estima que era necesario conceder al Gobierno un plazo para que pudiera comenzar a gobernar sin grandes sobresaltos. La teoría de que en tres meses no se le podían pedir soluciones a los problemas planteados ha dejado paso a la tesis de que hay que comenzar a apretar las clavijas. Para Verstringe, "los plazos se están acabando. No porqué el Gobierno lleve más meses en ejercicio, sino porque lo que realmente están finalizando son los plazos para resolver los problemas".

Las instrucciones de Fraga para el debate del día 20 se resumen en dos puntos fundamentales: dar por sabidas las críticas y ofrecer alternativas positivas. Dicho de otra manera, se quiere dar la sensación de que se apuntan soluciones en lugar de dar estacazos.

La estrategia parlamentaria del Grupo Popular cargará sus baterías con la discusión de la ley del Aborto. Toda la artillería pesada entrará en acción con la LOAPA y continuará con la petición de debates sobre política interior y seguridad ciudadana, economía y política exterior. El final de la batalla parlamentaria, que puede comenzar con la reprobación a algún ministro en concreto -Boyer y Morán son los principales objetivos- está previsto que sea una moción de censura. Para este fin último, los expertos del partido han comenzado a trabajar. La justificación de la moción, que será adobada con la consideración de que existen temas particularmente graves o caóticos, llegará a través de los temas económicos y diplomáticos. La ponencia que sobre economía presentará en el próximo congreso del partido José Ramón Lasuén comienza con estafrase: "La economía española está estrangulada por el paro, la quiebra y la deuda exterior".

La economía no se mueve por milagros

En el documento preparado para justificar las razones por las cuales se solicita un debate sectorizado sobre el tema económico se dice, entre otras cosas, que "al año de la gestión socialista comienzan las lamentaciones. El vicepresidente del Gobierno ha dicho que la situación de la economía española en estos momentos es desastrosa. ¿Debe ser la oposición la que debe perseguir al Gobierno para que exista este debate o debería el Gobierno de forma responsable proponerlo, dado que la situación la califica de desastrosa? La economía no se mueve por milagros sino con confianza y trabajo. Y las dos cosas escasean en estos momentos al máximo, porque las medidas adoptadas por el Gobierno socialista no han dado confianza ni a empresarios ni a trabajadores, con lo que los puestos de trabajo prometidos, hay que tener memoria, no se van a cumplir".Para Alianza Popular, la presencia de Miguel Boyer en el programa Españoles, de Televisión Española, sólo sirvió para dar moralina socialista. "Cuando tienen que concretar", se dice en el documento, "no dicen más que vaguedades y contradicciones. Lo que nosotros tenemos son datos y, de acuerdo con ellos, al cabo de nueve meses de Gobierno socialista, debemos concluir con el vicepresidente Guerra que la situación a que nos han llevado, y llevarán en el futuro, será el desastre económico. Estamos ante fuertes incrementos del déficit público, altos tipos de interés y tasas de inflación que son muy superiores a los de los restantes países europeos, devaluación constante de la peseta frente al dólar, pérdida de reservas, etcétera".

Tras afirmar que el presidente del Gobierno ha tenido que moderar su lenguaje y sus entusiasmos para encubrir lo que viene siendo el fracaso socialista, se afirma: "Nosotros, por el bien de nuestro país, esperamos que los socialistas aprendan la lección francesa, recapaciten y caminen de verdad sobre suelo real y no de sueños y utopías. Hay que disminuir los impuestos y, los que se recaudan, redistribuirlos mejor; hay que disminuir el gasto público, hay que fomentar la inversión privada con medidas desgravadoras y de fomento. general del ahorro; hay que afrontar el tema del paro con realismo y con valentía, ayudando hasta donde se pueda ayudar, pero utilizando bien estos recursos; en fin, hay que tener imaginación política, con planes claros y que se cumplan. Con medidas concretas se podrá bajar la inflación, aumentar el PIB y los puestos de trabajo".

Política atlantista, neutralista, tercermundista y europeísta

Con respecto a la necesidad de realizar un debate sobre política exterior, en el documento base elaborado para solicitarlo se dice que en estos momentos la política exterior española no es clara: "No se puede ser al mismo tiempo atlantista, neutralista, tercermundista y europeísta. Las decisiones que se adopten en este sector no pueden salir de un libro, ni siquiera de un programa más o menos difuso, sino de un análisis estricto de nuestros intereses y posibilidades".En lo referente a las negociaciones con la CEE, se afirma que todo se está haciendo precipitadamente y mal. "Parece que se navega sin brújula, a lo que salga. Hay tres datos importantes en estos momentos: primero, las negociaciones no son globales; segunda, existen o se quieren imponer, por parte europea, condiciones previas, y tercero, se aceptan diferentes períodos transitorios".

Más adelante se concluye que "el Gobierno socialista demuestra, a través de sus declaraciones -una alusión a Marín-, desconocer las intenciones reales de los países comunitarios con respecto al ingreso de España y que seguimos sin fecha, a pesar de las declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores".

Alianza Popular entiende que el Gobierno, por lo que respecta a la OTAN, "es más complicado que la pregunta que hizo Unión de Centro Democrático en el referendo de Andalucía". Se preguntan los expertos de la oposición los beneficios que ha supuesto para España la generosa apertura de la verja de Gibraltar. Opina el Grupo Popular que las reticencias respecto de la OTAN no pueden satisfacer a norteamericanos ni a europeos y que el no reconocimiento de Israel es una exigencia que no se puede condicionar a que alcancen el poder los laboristas de Simón Peres. Para quien ha elaborado el documento, "sería necesario no desperdiciar el esfuerzo real y los logros conseguidos por el Rey en sus viajes".